Resumen Fiestas del Cristo 2018. Por Miguel Moreno

HE CUMPLIDO UN SUEÑO (FIESTAS Y FERIA TAURINA CADALSO-18)

Una  mañana festiva se me acercó en el bar de Mariano. Pedimos unas cervezas y me confesó: “El día del Cristo he cumplido un sueño”. Y azorado me lo explicó con ese semblante que todos tenemos cuando somos felices: “He pujado después de la Procesión en la rifa del Cristo y he conseguido meterle a la iglesia”. Levanté el botellín y le choqué con el suyo. “Enhorabuena, no todo el mundo consigue en esta vida cumplir sus sueños”. Todos tenemos sueños: Bucear hondo, volar alto, ser importante… Él, en cambio, soñaba con introducir al Patrón de su pueblo en el templo. Es primo-hermano mío. Se llama Jesús López Moreno y es de Cadalso, nació en la calle de San Antón. Allí se sienta en el umbral de su casa a recordar: “Primo, ¿recuerdas cuando jugábamos de niños a los toros en la calle?” ¡Cómo no lo voy a recordar si estoy hecho de recuerdos y allí mismo tomé la alternativa..!

Mi madre, comenzando septiembre, prepara un altarcito con la imagen del Cristo enfrente de su puerta. Unas flores, unos adornos, alguna fotillo, un par de lamparillas y en el centro: “Su” Cristo. Es pequeño y humilde pero se atisba grande como su amor. Si hace aire las lamparillas se apagan, pero ella las vuelve a encender santiguándose con la ilusión de que ya no volverán a extinguirse, como lo hace la vida... Un año “El Zorro Corredero” le hizo un reportaje, de esos que sólo las personas enamoradas de Cadalso saben hacer. Se llegó a casa con su cámara en ristre y un montón de recuerdos imprecisos por el tiempo pasado. Tiró unas fotos y se sentaron frente al altar para ver cómo relucía. Luego mi madre le fue ordenando, uno por uno, sus recuerdos y Pedro la escuchaba embelesado por la emoción. Mi madre se llama Gregoria, pero en el pueblo todo el mundo la conoce como “La Asun”. Tiene fama de trabajadora, sociable y cariñosa. Yo no…

Ver: Asun y su altar del Cristo del Humilladero en las Sillas

                Inmaculado en el vestir se apoya sobre dos muletas, cabeza erguida y mirada franca dirigida al destinatario de sus anhelos. Le saludo según pasa la Procesión y sonríe satisfecho. Las frases de rigor por fuera, los sentimientos por dentro. Es tan bueno, tan noble, tan cariñoso… que habla sonriendo, sin mueca de pesar. Se llama Fco. Álvarez Frontal, Paco “El Piejo”, parece sacado de una conmovedora novela castellana de Delibes. Su hijo formó parte del primer equipo de un programa de toros que hicimos en Radio Cadalso. Corrían los últimos años ochenta y a aquel programa nunca le pusimos nombre. “Paquillo” permanecía en el estudio que estaba donde ahora se ubica “Betania”. Nos daba paso en directo desde la plaza de toros cuando Rufino se lo demandaba por su walki. Ahora entiendo por qué no poseía nombre el programa: ¿Para qué íbamos a ponérselo si todo el mundo sabía de la bondad de “Paquillo”? ¿Qué manía es esa de poner nombre a las cosas que no lo necesitan?

                Cadalso espera sus fiestas con un ansia de fiera hambrienta. Y cuenta los días que faltan como desde Cabo Cañaveral cuentan los segundos que restan para que despegue el cohete hacia el espacio infinito buscando aventuras. Todo un pueblo se apresta expectante a disfrutar con sentimiento, con sus mejores galas y con hospitalaria camaradería. En nuestra infancia colocaban "la verbena" en la Plaza el 8 de septiembre y, sin fallar, al día siguiente llovía o hacía aire. Y como las cadenetas eran de papel se estropeaban ante nuestra mirada atónita y apenada.



 Durante estos últimos años, desde que despega el primer cohete, ves a un yanqui cadalseño, tan grande como su corazón, correr de acá para allá siguiendo cualquier acontecimiento o persona para inmortalizarlo con su cámara de fotos. Se sube arriba, sobre el escenario de las orquestas, y le ves colocar a las cientos de personas que componen las Peñas en un santiamén. Y todos le hacen caso con satisfacción y le gritan: “¡¡¡Richard, eres el mejor!!!” Y baja de un salto riendo y todos le aclaman. “Richard, ¿has visto los capotes de los toreros colgados al sol de los balcones del Hotel Moncho?” Y claro, sale raudo a buscar la instantánea mientras por el camino va repartiendo incansable fotos y saludos. Oigo a un amigo suyo decir: “¡Este Richard Pickers es un cadalseño de pura cepa que lo trasplantamos en Estados Unidos!” 

 

         Este año cumplen su 30 Aniversario Los Colegas, ellos revitalizaron con su nacimiento, más si cabe, nuestras Fiestas. Desde el balcón consistorial dieron el Pregón de Fiestas “el colega” Diego Rodríguez Navarro junto al Presidente de la peña. Diego se encargó de ponernos en situación hasta el día 17 con sus palabras y el entusiasmo que le caracterizan. Es un artista internacional que vive, siente y ama a su pueblo. Posee una exquisita sensibilidad y una alegría innata que a nadie deja indiferente. Los Colegas y el resto de las peñas son el alma festiva del pueblo, las que le hacen ser único y singular además de difundir su nombre por doquier. A las tradicionales Muñana, Los Demás, Cadalseñas y Colegas, que disponen de sus propias charangas, se les unen, algo más silenciosas, La Cinta, Cabalito y este mismo año nació Ocho Apellidos Cadalseños, ocurrente nombre que reivindica en sí mismo nuestra ancestral historia. Moreno es el sexto. González no aparece…

                En el apartado matinal de los novillos me siento con Mariano sobre el chiquero número 9. Juan Pablo amable nos advierte de que sólo nos molestará cuando tengan que enchiquerar el novillo y que luego tengamos cuidado. Vemos pasar a los morlacos y opinamos sobre su trapío en particular y el estado de la tauromaquia en general. Seguimos la animada charla en Carabias junto a mi hijo Miguel, mi hermano Justo, Willy y Miguel Ángel; de tanto en tanto Salva nos tira las primeras cervezas frías de la jornada. Hablamos de temas festivos y de que las orquestas hay que contratarlas en octubre del ejercicio anterior porque si te descuidas luego pasa lo que pasa… Por tanto, ya mismo tienen que preocuparse del tema orquestal 2019. Acabando saludo a Marcelino, padre del lesionado, incansable y simpático muñanero Borja. A las 13:00h abandonamos la expendeduría de licores y viandas para dirigirnos a los aleccionadores coloquios que en las mañanas de toros organiza la Asociación Taurina Cultural "Cadalso". De camino veo a Moisés que lleva -por fin- la camisa blanquiazul puesta y a Felipe Cartas que carga con el pan para los bocadillos de La Muñana. En el Centro Cultural voto como cartel anunciador de las conferencias taurinas de noviembre al marcado con el número uno. En el coloquio tomo asiento junto a Mariano Vicente, como en los chiqueros. Le tengo en estima. El primer escritito de toros que me publicaron, hace más de 30 años en una revista del ramo, El Percal, se lo dediqué. Desde entonces nos afanamos en mantener esta amistad.

                Al convivir en la calle todos estos días, conozco a personas interesantes que me hacen nuevos descubrimientos. Así, hablé por primera vez con un joven muñanero que no conocía, Aarón, es hijo de un quinto mío, José Luis Recio (también se llamaba así el hermano mayor de Moisés "el de Las Tablas de la Ley", al que ayudó a encontrar la Tierra Prometida). Me comentó que tiene la ilusión de que alguna vez los fundadores cuenten sus vivencias de aquel primer año vivido en su personal Tierra Prometida Muñanera. Aarón me cautivó. Con muñaneros como él la continuidad de La Muñana está asegurada y en buenas manos.  Departo animadamente en el bar de la plaza de toros con mi hija Berta, Carola y Najat (qué momentos más divertidos pasé con estas tres integrantes de Las Cadalseñas), también con Jose “Peque”, Carlos y sus amigos de Barcelona, Cristina García, Joaquín “Piquillo”, Antonio “Culelo”, Yolanda Martín Miguel (sin toros se vive peor), Arturo Sánchez “Malavida” (cultísimo aficionado a los toros y a la historia. Es un placer hablar con él), Chema “Floi”, Pablo, Jesús, Juan, Samuel, Pilar y Ana, que son el alma de Los Demás, María José “Cantudo” camina espléndida, Vicente Álvarez es el fiel exponente de la simpatía… El camarero de la plaza lleva varios años por estos lares y la verdad es que nos trata muy bien. Le narro la anécdota de Maní hace años: “Una tarde del Cristo estaba la barra llena -como cualquier otra tarde-, los presentes bebíamos y reíamos desaforadamente. En esto llega Maní y como tardan en servirle da un golpe con la mano en la feble barra de chapa y todas las consumiciones caen como un castillo de naipes. Los parroquianos sorprendidos nos callamos y dirigimos la mirada hacia el lugar del ruido. Aquello parecía el saloón de una película del oeste cuando llega el protagonista, que encima es el más rápido del lugar con las pistolas. Instintivamente Maní exclama convincente: ¡Ponnos de beber a todos! Esa frase ejerció de milagroso bálsamo y súbitamente todo recuperó su pulso habitual.” Maní miraba lejos y quería cerca… Lo cierto es que hemos pasado instantes inolvidables en este lugar en el que llueven pipas, envoltorios y líquidos… En esto último, mejor no pensar.

                Al salir con Paloma de la plaza nos encaminamos a Cañardo a reponer fuerzas. Allí Aitor Neira nos trata con profesionalidad y cariño. En la barra pasamos un rato impagable la tarde del sábado 15 con Ángel Calvo, Jorge García y José Manuel Castrejón. José estaba preocupado por la grave lesión que sufrió en un ojo su admirado torero Paco Ureña. Allí hicimos repaso a estas y otras cuestiones; uno se percata del buen ambiente que se masca, se palpa, se disfruta cuando estás en sintonía amistosa con tus interlocutores. Siempre han sido muy atentos. Al igual que Miguel Álvarez, “El Cadalseño”, mi encantadora prima Nieves o mi amigo Balta, que cumple con la tradición de dirigirse a los toros detrás del cortejo municipal. Cuando le veo pasar por La Corredera, me saluda feliz y me recalca que procura no perder las tradiciones arraigadas en lo más hondo de su ser. Prueba de ello es su programa “Clásicos al Atardecer”, que se emite los sábados-tarde por Radio Cadalso. Hablo por teléfono con Paco “Pirata”, para mí el mejor presidente de La Muñana, junto a José Alfonso, rememoramos el difícil año de su toma de posesión: 1998 (veinte años, ya). El padre de Moisés me dice en “Vigi” que he estado perdido, me saluda afectuoso Bernardo “El de la Granja”, así como Santiago “Porrú”, mientras José Ramón Carrillo me sorprende. Me encuentro con Antonio “Chaleco” que me protegía de pequeño en aquellas batallas campales de la explanada del cementerio. Loli es mujer colmada de virtudes que nos hace la foto familiar de rigor en Moncho, a lo mejor se nos pega alguno de sus valores. Por contra, echo en falta a Ignacio “Colowal”, Agustín Morales, Paco “Jarana”, José Luis Martín, Jose "Parador”, mi tío Justo, Juanjo, Francis, Valen, Gabriel Mostacero, que amaba este lugar... y a tantos otros que con su presencia le dan un aliciente humano y divertido a estas jornadas.

            
    La mañana del sábado 15 es un clamor. Salen las peñas infantiles y se celebran los encierros, también infantiles. Nervios, carreras, risas, miedo en los más peques, caídas, movimientos inquietos de los bebés en sus cochecitos presintiendo lo que es su pueblo, gritos de los mayores reclamando atención a los más temerarios, toros astifinos ¿de cartón?, consignas de cuidado por los megáfonos, camisas peñistas que todos llevan con inusitado orgullo, jolgorio en estado puro... A ello no son ajenos los hijos de mi prima Isabel, Sergio y Miguel. Sin ir a comer nos fotografiamos con Mar y Justito, tan felices, delante del monumento de Carlos González. Esa tarde-noche visitan a mi hijo dos amigas forasteras. Alucinan observando ese bullicio de alegría y se sorprenden gratamente de que entre tanta aglomeración y algarabía no brote ningún altercado. “Efectivamente, este pueblo es muy especial, como nos había dicho tu hijo.” La mañana del domingo 16 pertenece a La Unión Musical de Cadalso que inunda de música el pueblo. Su origen se remonta a más de un siglo, lo que da idea de lo arraigada que está la música en nuestro pueblo. La música nos hace libres y mejores. 

                Para no romper la tradición, voy a terminar este resumen hablando de nuestra Feria Taurina que, a diferencia de las últimas temporadas, en ésta gozamos de muy buen tiempo. El público acudió en buen número a los cuatro festejos. El ambiente y la temperatura animaban a desplazarse hasta nuestra Monumental Metálica. La empresa de este año, Taurolidia, debió esforzarse en contratar al novillero triunfador de Racimo de Oro del pasado año: Jesús Mejías. Para mí fue un error, al igual que lo fueron el no anunciar la sustitución de uno de los novilleros el día 14, ni la incomparecencia de una cuadrilla y la sustitución de otro novillero la tarde del 15. Hubo también otros “descuidos” como las banderillas, que no clavaban ni tirándolas con ballesta, cuestiones estas que contradecían la buena predisposición de la que hizo gala el empresario la noche de la presentación de carteles. Entonces, según sus propias palabras, quedó gratamente sorprendido por la gran afluencia de público al evento lo cual le motivaba para corresponder. No están los tiempos taurinos como para derrochar y dilapidar el capital que supone la afición cadalseña (y de toda la comarca) a los toros. Medítenlo seriamente. Todos saldremos ganando, especialmente ustedes. El serial lo anunciaron como "Feria Multiencaste", uno de los más encastados fue el caballo (el día 14 fueron dos) que ejercía de mulilla. El equino parecía un proyectil, del que Jesús Yuste y los porteros de la Puerta de Arrastre estaban atentos para avisar de su llegada y así evitar riesgos innecesarios. Eso le recomendaba yo a Rafael de Paula cuando toreaba...

                El día 14 se lidiaron seis novillos muy bien presentados y astifinos de "Guadajira", ya sabéis, encaste Domecq. Mayoritariamente este encaste posee la particularidad de que los ves desplazarse y te imaginas en una mecedora. Los despacharon: Fernando Flores, sustituto de Darío Dominguez, oreja y dos orejas, sufrió una cogida leve en el cuarto. Jesús Martínez pitos y silencio con aviso. Juan Carlos Benítez, silencio con aviso y silencio con aviso. A Benítez se le ve placeado y con buenas maneras toreras. Fernando Flores se alzó con el Racimo de Oro del presente año y el tercer novillo, "Marítimo", fue premiado como el mejor del ciclo, el galardón a la mejor estocada quedó desierto por el Jurado de los Premios Racimo de Oro. En la tarde del 15 se corrieron bureles de Aurelio Hernando de variadas y bonitas capas, cómodos de pitones y muy flojos. Faltó una cuadrilla por lo que las dos restantes hubieron de suplirla. Los pasaportaron indiferentes: Alejando Fermín, saludos y palmas. José Cabrera, que reemplazaba a Alfredo Bernabéu, silencio y dos orejas. Javier Gallardo, saludos con aviso y vuelta con aviso. Muy bullidores pero muy noveles. El día 16 anunciaron novillos de Monteviejo y Urcola, propiedad de Victorino Martín. Los ganaderos tuvieron poca consideración con nuestra plaza al traer seis animalejos impropios para cualquier plaza, pero más para la de Cadalso. Victorino bien sabe de la tradición ganadera cadalseña y debió mandar unos animales más acordes o no anunciarse. Ya sabemos que los novillos suelen ser "desechos de tienta y cerrado", pero tanto… Con ellos mostraron su bisoñez y la carencia de recursos por falta de contratos: Alberto Pozo, silencio y silencio. Joselete, silencio con aviso y vuelta. Diego Fera, silencio y silencio. Fera nos "secreteó" que es el yerno del ganadero de Guadajira… Se cerró la feria la tarde del 17 con una novillada de rejones para tres rejoneadores que han tomado la alternativa (¿). Aceptable y variado juego de los morlacos de Hnos. González, acometiendo a las cabalgaduras de: Martín Burgos, ovación y dos orejas y rabo esperpéntico (¿sería cosa del asesor caballista llegado allende?). Iván Magro, oreja y oreja. José Manuel Cordero, vuelta y ovación. 

                Como todos los años el servicio de plaza y corrales ejerció su labor de forma impecable. Salvo excepciones, también la autoridad se esmera cada temporada en mantener e incluso mejorar el prestigio de nuestra plaza. Mi felicitación sincera a José Luis Acuña, que trabaja denodadamente para ofrecernos puntual el completo programa de las novilladas. Este año ni siquiera coincidí con él durante las mañanas taurinas para tomarme unas cañas en su grata compañía. Habrá que desquitarse. Marcelo vuelve con ímpetu renovado a portar el cartel anunciador de los ejemplares a lidiar. La banda de música nos deleitó con los pasodobles de su escogido y variado repertorio. Por cierto, que abajo suena virtuosamente; eché en falta a Pedro Alfonso que me anunció que este año se pasaría "debajo del tablao". La alegría y el bullicio se desparramaron por todo el pueblo para dar el adiós a las Fiestas con el "Pobre de mí" y ondeando nuestra bandera. Un espectáculo en toda regla que Ángel Canoyra y Patricia González, entre otros muchos, viven con renovado frenesí final. Espectacular era ver cada mañana las calles perfectamente limpias y acicaladas. Un primor. Los servicios de limpieza se merecen la enhorabuena de todos los cadalseños y visitantes por su abnegada y extraordinaria labor. Ya sé que lo hacen por la satisfacción del deber cumplido, pero bien merecido tienen un pequeño estipendio... El día 19 me entero de los protagonistas de las XIII Conferencias Taurinas patrocinadas por la A.T.C. "Cadalso". Tendrán lugar en noviembre, a las 19:00h, en la sala de conferencias del Hogar del Jubilado. Día 3: Carlos Abella, periodista. Día 10: Hazem Al-Masri, "El Sirio", banderillero. Día 17: Fco. Ruiz Miguel, Matador de Toros. Día 24: Borja Domecq Noguera, ganadero.

                David “Pirracas” me pregunta desde la bici el 22 de septiembre: “¿Te cuesta hacer este resumen?” ¡Mucho!, hasta que arranco… Cada otoño digo que es el último. “¿Y la inspiración?” Le respondo como lo hizo el malagueño Picasso: Es fundamental que cuando llegue te encuentre trabajando (yo, ni con esas…). Paco Gallego, por su parte, siempre me anima a seguir. Abstraído en estas elucubraciones llegué a mi patio. Me reencuentro con algo sorprendente que se repite puntual por estas fechas, como se repite la mítica canción “Melancolía en Septiembre” de Peppino di Capri. Es difícil de creer, pero lo cuento: Aparecen una mantis religiosa sobre el césped, un saltamontes grande que se asienta en el entorno del muro que da al patio de Fela, y una salamandra que escala por las noches la pared sur de mi casa. El saltamontes pasa el invierno con nosotros. Muchas Navidades nos las felicita desde la valla. Los bichos cadalseños también poseen su corazoncito, como lo tienen los espejos cuando nadie los mira. Por cierto: ¿Nos seguiremos mirando en el espejo de las Fiestas de 2019? “Llaneza muchacho, no te encumbres, que toda afectación es mala”, le aconsejaba Don Quijote a un actor que se miraba en demasía en los espejos. 

                                                                                                                              Miguel MORENO GONZÁLEZ