Cada fin de semana, la Plaza se convierte en un pequeño
mercado donde las gentes de Cadalso ponen sus productos a la venta.
El verano es la estación en la cual podemos encontrar más
vendedores, que proporcionan al comprador esas verduras y frutas tan sanas y
sabrosas de nuestros huertos, es el dar y recibir, dar un poco de dinero y
recibir todo tipo de hortalizas de huerto donde se crían con el esmero de los
buenos hortelanos cadalseños y el agua fresca y buena de pozo de toda la vida.
Ahora con el otoño sobre nuestras cabezas no hay mucho que
proporcionar a los compradores, pero siempre existe algo que nuestros campos y
la naturaleza nos ofrecen, y que sirve
para que unos disfruten de su sabor, y otros consigan unos euros que nunca
vienen mal en esta época de crisis.
El sábado pasado dos vendedoras cadalseñas, exponían su
mercancía a los ojos de todos los viandantes y turistas que pasaban por la
Plaza. Esta vez la mercancía eran unos vistosos níscalos o “miscalos”, que así
también se les conoce en Cadalso desde siempre, y que eran la atracción de
todos, más todavía cuando preguntabas el precio, bastante más bajo que en la
capital, precio que los hacía mucho más apetitosos y fáciles de adquirir. ah! y pesados con la romana de toda la vida.
Es muy probable que con la llegada del frío de estos últimos días de noviembre, las heladas hagan acto de presencia en nuestros pinares, y por lo tanto desfavorezca la buena cría de estos apreciados hongos.
Así que
puede que estas cestas hayan sido las últimas expuestas en ese mercado
improvisado de la Plaza, y de nuevo tengamos que esperar un año para volver a
ver níscalos a la venta. Antes llegarán los espárragos, y más tarde las frutas,
hortalizas y verduras, pero esto ya será en primavera y verano por lo que habrá
que esperar para volver a ver de nuevo a esas vendedores-as que llenan nuestra
Plaza de alegría y buenos productos cadalseños.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso