Cuidado con las víboras
No es muy normal encontrarse con una víbora en nuestros campos cadalseños, más bien diría que es casi imposible, pero a veces ocurre y nos sorprende un ejemplar de este ofidio para ponernos en una situación de alerta y a la vez de angustia por su presencia. No voy a deciros dónde encontré esta víbora, no muy grande pero sumamente peligrosa, que lanzaba ataques casi constantemente. La posición de arriba es de huida, pero no así la de abajo con la cabeza y el cuerpo contraído para lanzarse sobre lo que la amenaza, en este caso un bastón de montaña. Al final ella me dejó en paz y yo a ella, cada unos siguió su camino y sólo el recuerdo y el lugar quedará para siempre. Por cierto, no las molestéis y menos matarlas, también tienen derecho a vivir, aunque su presencia no guste a muchos.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
3 comentarios:
Hola, pero las fotos están un poco borrosas para poder identificar bien la cabeza triangular y detalles...¿Un poco preocupado al enfocarla? No es de extrañar
Pero qué tipo de ojo tenía y a qué tipo de víbora piensas que pertenecía; ya que los colores de las fotos difieren por la luz del flax, supongo.
No estaría mal decir qué zona (todas son tan grandes y ellas tan pequeñas) es dónde la viste pues de esa forma se visita con más prudencia. Además no pienso que ya nadie las mate sólo porque es venenosa; su hábitat es ése y ése el territorio que hay que respetar. Sería como destrozar o pisar todas aquellas setas que por ser no comestibles o tóxicas no las podamos llevar, cuando su labor es primordial por micorrizas simbióticas con tantas plantas, etc.
Saludos
Por el suelo va reptando
y en guardia para el ataque
su poder nos va mostrando,
y el fotógrafo plasmando
su furia cuando se bate.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho
Vaya bicha......peligro
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