Desde siempre el hombre se ha rodeado de una serie de
herramientas, utensilios, aperos y adornos que le han servido para desarrollar
su trabajo y su forma de vida. Cada una de estas piezas adaptadas a un
determinado uso le sirvieron para una serie de oficios determinados y para
hacer más fácil la vida diaria en su entorno.
Las cocinas tenían un enser de madera donde se colocaban las tapaderas de hierro.
Plato-bandeja que D. Crotido de Simón Martínez dueño de El Cafeto, regalaba a sus clientes. Año 1929
Cadalso como todos los pueblos también tuvo la necesidad de
desarrollar elementos adaptados a sus necesidades. Aunque la mayoría de las
actividades se repiten en la zona, muchas de las piezas a veces eran únicas de
la comarca y por lo tanto distintas al resto de España.
En la farmacia de Don Rafael Reig en la calle Real se realizaban todo tipo de fármacos para la cura de los enfermos. Este fue prescrito por el Dr. Porras, médico de Cadalso en 1923
La mano del artesano siempre estuvo presente en Cadalso, hoy
ya casi no son recordados pero todavía los más mayores albergan en sus
recuerdos personajes que trabajaron la madera, la piel, el hierro y como no la
piedra. Sus nombres y muchas veces la familia, está ligada a estas profesiones
hoy casi desaparecidas si exceptuamos la de la piedra.
La cantarera no podía faltar en ninguna casa cadalseña. Las casas todavía no tenían agua corriente por lo que se sacaba del pozo o se recogía en cantaros en las fuente de la Plaza.
"Albarcas" o abarcas utilizadas por los hombres del campo.
Bicicleta de la marca Wilson utilizada a mediados del siglo XX
Los chocolates Matías López se vendían en las tiendas de ultramarinos de Cadalso. La fábrica fue fundada en 1855 por el gallego Matías López López en El Escorial y cerró en el año 1965
En esta segunda entrega de objetos y herramientas que un día
formaron parte de la vida cadalseña, aparecen utensilios de cocina, aperos de
labranza o simplemente adornos para la casa. Todos prácticamente están en
desuso, pero casi todos son recordados por los menos jóvenes y más por los de
cierta edad, ya que probablemente convivieron con ellos y fueron parte de su
trabajo y de su día a día.
Rastra, realizada en madera y hierro servía para allanar los huertos y prepararlos para la siembra. Era enganchada a una caballería que tiraba de ella.
Zorro Corredero
Fotos: Museo Etnológico de Cadalso. Casa Corredera
Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
14 comentarios:
Enorme labor la que llevas realizando desde hace años. En tu museo está la historia de la gente cadalseña y de todo el pueblo.
Gracias.
Inés
A todos los que nos gustan estas cosas nos tiraríamos horas y días enteros viendo esos objetos tan valiosos en sentimientos y recuerdos. Gracias por conservarlos, por cuidarlos y gracias también por mostrárnoslos. Un saludo. Javier.
Gracias a los dos, y por supuesto el museo está a vuestra disposición cuando lo deseéis.
Un saludo
Pedro
A mi padre yo le vi
muchas veces con la rastra
y gran emoción sentí,
al verla plasmada aquí,
y su recuerdo me arrastra.
Muchas gracias Saturnino por tus palabras en forma de poema.
Un saludo
Las albarcas que recuerdos no se rompían nunca
Carmen Frontelo Morales
Las abarcas que tenia mi padre para ir al campo
Carmen Frontelo Morales
Pedro ese café lo usaban todas las madres de antes la mía siempre tenía el puchero en la lumbre con la Malta y el cafeto mezclado y que rico sabía
Dolores Saez Canoyra
Buenos pucheros con mezcla había siempre en todas las lumbres de Cadalso, cualquier hora era buena para su degustación, pero antes de servirlo había que retirar con una cuchara los posos.
Zorro Corredero de Cadalso de los Vidrios como lo sabes pedro que era así
Dolores Saez Canoyra
Bonito e interesante museo me gusta
Aniceto Herranz Lizana
No lo he visto nunca cuando vaya a esos Montes y a la naturaleza y ese olor a campo y ire
Aurora Ferrera Ruiz
Qué interesante y qué buena vuestra labor. Estoy deseando visitarlo. Enhorabuena!!!! Y gracias por traernos estos recuerdos tan bellos.
Muchas gracias María. Espero verte pronto por aquí.
Un saludo.
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