Santa María del Castillo. Frómista ( Palencia )
La villa histórica de Frómista ( Palencia ) en pleno Camino de Santiago, contiene una belleza artística en sus monumentos que la convierten en una de las poblaciones más importante del Camino. Con apenas 900 habitantes Frómista es una villa tranquila y apacible que te invita a pasear por sus calles y a entablar conversación con sus amables habitantes. Los romanos la llamaron Frumenta parece ser que por los grandes campos de cereales que siempre han existido.
Hasta el siglo XV fue lugar de asentamiento de judíos gracias a Alfonso VII, teniendo cultura hebrea y cristiana como en tantas ciudades y pueblos de la época. Cuenta Frómista con tres iglesias de gran belleza, destacando la iglesia de San Martín, auténtica joya del románico. Hoy les toca el turno a la de Santa María del Castillo y la de San Pedro.
La iglesia de Santa María del Castillo es la primera que nos encontramos viniendo de Boadilla del Camino en nuestro recorrido del Camino de Santiago. Localizada en una pequeña altura, la vista de Fromista espectacular. De estilo gótico tardío y portada renacentista, es una obra sólida y robusta, albergando un retablo del siglo XVI que no pude ver al estar cerrada. Se construyó sobre los restos de un castillo y no se utiliza para el culto. En la actualidad se ha montado Vestigia, un audiovisual que guía al viajero tras las huellas que ha dejado la historia a su paso por Frómista.
San Pedro. Frómista ( Palencia )
La iglesia de San Pedro, gótica del siglo XV, aunque como la vemos ahora se proyectó en el XVI. Esta dividida en tres naves con bóvedas de crucería estrelladas y es la parroquia de Frómista. Se encuentra en la plaza de Tuy, plaza que recibe este nombre por estar hermando con Frómista y ser la villa donde murió y está enterrado San Telmo, patrón de de la villa.
La portada es renacentista, fue diseñada por Juan de Escalante en 1560 y se asemeja a la estructura de los arcos romanos de triunfo, con arco de medio punto y columnas pareadas sobre un plinto de piedras.
El interior del templo, en este momento durante la misa del patrón San Telmo, destaca su gran tamaño. Formada por tres naves longitudinales, todas ellas cubiertas con bóveda de crucería.
"Cuanto más sencillo es el dibujo de la bóveda, más antigüedad tiene, por lo que podemos deducir, a partir del dibujo de las bóvedas, que la iglesia se construyó desde la cabecera hacia los pies, dado que en esta última zona es donde encontramos los diseños más complejos de las bóvedas. Y otra cosa importante. Si os fijáis bien, veréis fácilmente cómo el eje de la nave central está torcido. Resulta que al lado de la iglesia existe un arroyo, hoy tapado. Si la iglesia hubiera seguido el eje trazado por la cabecera, se hubiera construido demasiado cerca del arroyo, en terreno inestable, y la iglesia hubiera tenido problemas para mantenerse en pie; por ello, prefirieron desviarla algunos grados para llevarla a terreno más firme.
El retablo mayor es de la primera mitad del siglo XVII, diseñado por Francisco de Trejo. Su estructura es bastante clásica, dividido en calles verticales y cuerpos horizontales. De la imaginería destaca la escena del Descendimiento, atribuida al círculo de Juan de Valmaseda, un escultor renacentista de cierto renombre en estas tierras palentinas."
Web Ayuntamiento de Frómista
http://www.fromista.com/?v=ayuntamiento&c=apartado&a=rutas_ocio
Interior del templo dividido en tres naves. En este momento se celebraba la misa de San Telmo.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
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