El Valle de la Fuenfría en primavera.

El Valle de la Fuenfría, un lugar del Guadarrama

El Valle de la Fuenfría es un lugar muy frecuentado por aficionados al montañismo, por algo discurren multitud de caminos y senderos que nos conducen a muchas de las cumbres emblemáticas de la Sierra de Guadarrama, pero también es un paraje de esparcimiento y de visitas familiares para comer, dar un paseo o simplemente hacer fotos. El lugar está lleno de rincones que nos atraerán en las distintas estaciones del año. En invierno la nieve, que suele cubrir el bosque, será un gran atractivo, seguramente el más llamativo, al igual que el otoño con sus colores, el buen tiempo del verano o la actividad de la primavera, todos lo momentos son buenos para visitar el Valle de la Fuenfría. Esta vez es la primavera la estación elegida y no nos arrepentiremos, de caminar lentamente, observar la vida que a nuestro alrededor se mueve y si podemos o queremos realizar algunas fotos de todo lo que nos regala este bello paraje.

Un puente por el que discurre un caudaloso arroyo, un reluciente acebo, la escurridiza y a veces confiada lagartija serrana, el cuervo que desde una rama observa el ir y venir de gentes por la Calzada Romana, vía XXIV que unía Toledo con Segovia, unas flores que nacieron al cobijo de un viejo tronco, los colchium que colorean a miles el manto vegetal, la señal de Camino de Santiago que nos sorprende, siii, también por aquí pasan los peregrinos camino de Santiago, la curiosa e inquieta ardilla que se desplaza de rama en rama, o el colorido arrendajo, tan acostumbrado a las visitas, que se acerca para recibir algún trozo de pan. Todo es naturaleza en el Valle de la Fuenfría, un lugar para disfrutar de muchas maneras y que entre todos debemos saber conservar y proteger. 

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La Fuenfría con raquetas, otra forma de disfrutar el invierno.






Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso