(A Balta y a sus Clásicos cadalseños, que, incansable desde hace catorce años, nos enseña a amar la música y a lo nuestro en Radio Cadalso…)
UN SORDO QUE OÍA LA MÚSICA EN SU INTERIOR
Beethoven era un genio. Tenía la cabeza llena de pasión. Tengo una suscripción
a la Filarmónica de Berlín. Hay días que se los dedico casi en exclusiva a la
música, especialmente a él. Las imágenes, el sonido, las tomas, los gestos y
las expresiones conmovidas de los profesores, el dinamismo de la batuta del
director, las tomas al ralentí del auditorio, las lágrimas de algún (a)
espectador, las notas virtuosas de los instrumentos… son puro goce, un
irrefrenable entusiasmo.
Cuenta Balta en su programa de las tardes sabatinas de Radio Cadalso, “Los Clásicos al Atardecer”, que Ludwin
poseía una personalidad dificilísima, un punto atormentada. Sin embargo,
componía música maravillosamente. Qué cantidad de matices, giros, notas… Creaba
de forma arborescente, embriagadora, total, única… Utilizaba todos los
instrumentos, todas las sensaciones, todo lo que la vida le regaló y que él,
generoso, lo compartió con todos nosotros agradecido.
¿Qué andaría por su cabeza para crear tanta belleza? En sus comienzos fue
denostado injustamente por la élite musical asentada. Consideraban esos expertos que su música más que tal era
simplemente ruido. Ya, ya, ruido… Fue algo rutilante jamás creado hasta
entonces. Eso es lo que era (sigue siéndolo) este genio musical, revolucionario
e innovador.
Me gustaría estar perdido entre la orquesta de manera invisible para
sentir y observar la música en estado puro. Me fascina la forma en que los
profesores se abandonan a su creatividad, sus gestos, sus movimientos, su
impronta sentimental… Sus ojos, esos ojos de los músicos, desprenden poesía.
Todos los humanos sabemos que tenemos algo dentro que no sabemos descifrar y
que moriremos con ello. Beethoven halló el medio de hacerlo: ¡La Música!
Siempre he pensado que cada uno de nosotros, los humanos, somos únicos,
irrepetibles, especiales… Oyéndole me reafirmo en esa aseveración. Flotar,
volar, emocionarte… Fue él quien me descubrió que puedo volar sin tener alas.
Volar con la imaginación… A notas llenas de pasión arrebatada le suceden otras
de una sutileza sobrecogedora. Sordo se quedó creando una música nueva y
maravillosa que oía en su interior, mudo no quedó: “Yo compongo música para que me quieran…” Con tanto ahínco lo hizo,
que muchos jamás dejaremos de quererle…
Miguel
MORENO GONZÁLEZ
Muchísimas gracias a los dos, Miguel y Pedro, Pedro y Miguel, y agradecimiento infinito a Beethoven y demás genios que nos hacen más placentera la vida.
ResponderEliminarBalta
Buenos días Pedro
ResponderEliminarEsther Martin Fernandez
Buenos días!!!
ResponderEliminarMis mejores deseos para el día
Ana Teresa García González
Su primer concierto lo dio con 7 años.... Su música me llena el corazón. Enhorabuena al Zorro, a Balta y a ti, por éstos escrititos de los jueves. José A. Álvarez G. De Guzmán.
ResponderEliminarSi hay un Creador.. como es que no incluyó la música en su proyecto..
ResponderEliminarArgumento en mi favor.. Saludos.
Gracias Pedro y Miguel por regalarme cada jueves uno de los ratos más bonitos de la semana.
ResponderEliminarCadalseño
Gracias a todos por vuestras expresiones de admiración hacia la música. Gracias también, una vez más, a Beethoven, a Pedro y a Balta. Todos son dignos de admiración; pero lo de Balta es para mí un ejemplo a seguir en su amor por la radio (¡catorce años manteniendo, él solo, aquella bendita utopía que era Radio Cadalso al nacer!), la música, el ciclismo y Cadalso. Siempre Cadalso...
ResponderEliminarGrande Balta
ResponderEliminarRafa Muñoz
Rafa Muñoz , muchas gracias. Un abrazo
ResponderEliminarBaltasar Villarin Conde
Q guapo q estás Balta ,tu cara refleja la gran persona q eres,
ResponderEliminarMari Carmen Carretero Santillán
Mari Carmen Carretero Santillán, muchísimas gracias, ya tiene años esta foto. Un beso fuerte.
ResponderEliminarBaltasar Villarin Conde
Qué grande Balta!!! 👏👏👏
ResponderEliminarRuqela Tuyes
Ruqela Tuyes, muchísimas gracias
ResponderEliminarBaltasar Villarin Conde
Precioso relato!! Que difìcil es emocionar, solo los grandes lo consiguen. Y la música remueve tantos sentimientos!!
ResponderEliminarA mi me pasa con Ennio Morricone. Me apasiona.
Muchas gracias por este bello relato.
ME A GUSTADO MUCHO MUUUY INTERESANTE 👏👏👏👏👏
ResponderEliminarAurora Frrera