Bodega Cooperativa de Cadalso
La portada de este mes de octubre está representada por la Bodega Cooperativa de Cadalso en sus comienzos. En la foto de 1957 se aprecia una cooperativa muy distinta a la de hoy día, las caballerías eran principalmente el medio de acarreo de la uva, así como los carros de mulas o de bueyes, como el que aparece en la foto. Nostalgia de un pasado cadalseño que ya nunca se repetirá.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
Buenos días Pedrito que foto más Bonita de la vendimia de antes me acuerdo de esos carros de los de las Rozas que venían a la vendimia
ResponderEliminarDolores Saez Canoyra
Vaya foto bonita y nostalgica de Cadalso. Eres grande Zorro.
ResponderEliminarMariano.
Bonita y entrañable foto así es como la recuerdo yo de pequeño cuando iba a llevar el desayuno a mi padre. Con los carros tirados con mulas y con bueyes que estos venían de Rozas Y con los borricos y mulas se acarreaban la uva a nuestra bodega cooperativa Cristo del Himilladero
ResponderEliminarEsta foto es única, por su belleza etnográfica y porque es irrepetible. Muchas gracias Pedro por compartir estas fotos cargadas de historia de Cadalso.
ResponderEliminarUn saludo
Carmen
Ay! Perico, Perico, cuantas cosas tienes escondidas, menos mal que las compartes. Es una imagen impresionante. Muchas gracias.
ResponderEliminarMari
Muchas gracias a todos, no hay nada mejor que compartir y más si las personas, como en vuestro caso, son agradecidas.
ResponderEliminarUn saludo.
Los socios, trabajadores y colaboradores de la Bodega Cristo del Humilladero, te damos las gracias por recordar en tu blog, con esta fotografía, a todas las personas que crearon nuestra bodega y que año tras año la han mantenido con su trabajo y sus uvas.
ResponderEliminarUn gran abrazo y nuestros mejores deseos para que sigas promocionando todo lo que hacemos por Cadalso.
Bodega Cristo del Humilladero
Muchas gracias a todos vosotros por el ánimo que desde hace años estáis poniendo para sacar la bodega adelante, sólo puedo desearos la mejor suerte porque todo vuestro trabajo e ilusión repercute y repercutirá en el mejor bienestar de Cadalso y los cadalseños.
ResponderEliminarEnhorabuena.
LAS UVAS DE LA GARULLA
ResponderEliminarApilados en montón,
de racimos llenan sacos,
y avispas sin arrumacos
les pican por diversión.
De las uvas dispersión
entre lonas se zambulla
y dos dedos apabulla
y las recoge del suelo,
y coruchos sin recelo
llaman las de garulla.
Madre mía yo no había nacido. Entrañable foto
ResponderEliminarChelo Villarin Recio
La foto de la bodega es preciosa cómo era la vendimia antes
ResponderEliminarMaria Antonia Hernández
LOS CENCERRONES DE LA PARRILLA
ResponderEliminarDespués de la vendimia terminada
solíamos echar una jornada.
En las viñas, buscando el cencerrón,
y de la mula llenando el serón.
Eran días hermosos y otoñales
con las hojas muriendo en los parrales.
Negreando lo que quedó en la vid
de estos campos gloriosos de Madrid.
Así era la vendimia del sin tierra,
del que lucha en la vida y no se aterra.
Y aparta los abrojos del camino
variando los designios del destino.
Volvíamos a casa con la carga
armados con la lanza y con la adarga.
Del esplendor fulgente del racimo
que nos daba calor junto al arrimo.
Del leño incandescente de la lumbre,
y el porrón heredad de la costumbre.
Convertido en el mosto que hace al vino
fortalecer el ánimo cansino.
Según la sabia opinión de los viejos,
duchos en vinos jóvenes y añejos.
Legatarios de una secular ciencia
la voz universal de la experiencia.
Y pisábamos la uva en una artesa
anclada y sustentada por la mesa.
Tosca bodega en el angosto hogar,
decimonónico ancestral lagar.
Luego aquel caldo iba a la tinajilla
calzada con las patas de una silla.
Permitiendo al tiempo hacer su labor,
dándole al mosto solera y sabor.
La abríamos la noche de difuntos
al amor del fuego asando castañas,
los cuatro en mi casa todos juntos
con mi padre contándonos hazañas.
SI HOMENAJE SE RINDIERA
ResponderEliminarA la mula en Cenicientos
Si homenaje se rindiera
a bestias de arada y carga,
una estatua ancha y larga
la mula se mereciera.
La viña lo agradeciera
y el barbecho en sus cimientos,
y los buenos sentimientos
de los coruchos de antaño,
del pastoreo y rebaño
de campos de Cenicientos.
VUELA EL TAMO DE LA PARVA
ResponderEliminarVuela el tamo de la parva;
la tarde cayendo está
y el sol se aleja y se va
barbeándose la barba.
La mula impaciente escarba,
y desprovista de arreos
comienza a dar cabeceos,
y a la cuadra se encamina
al pesebre que culmina
el ansia de sus deseos.