La acebeda del Puerto de Somosierra se encuentra a unos pocos kilómetros del puerto, es una vieja acebeda que se mantiene en el tiempo y cuyos ejemplares, hoy en día escasos, tuvieron que ser muchos más para dar nombre al pueblo que se encuentra a su lado, me refiero al pueblo madrileño de La Acebeda. Hoy en día es más un bosque de robles, la mayoría jóvenes, que una acebeda, pero a medida que la recorremos nos iremos encontrando con grupos de acebos que crecen junto a los robles y que en esta época nos ofrecen sus coloridos frutos rojos.
El lugar es muy tranquilo y en el silencio del bosque disfrutaremos con los otoñales colores de los robles que contrastan con las siempre verdes hojas de los acebos, que en la intimidad del bosque ofrecen en el invierno los ricos frutos a mucho animales, frutos muy bien recibidos ya que en esta fría estación los demás árboles duermen en el letargo invernal y nada pueden proporcionar de alimento a los animales del bosque.
El acebo es un árbol delicado, de lento crecimiento y muy supeditado a la humedad, características que han contribuido a que sea muy escaso en la Sierra de Guadarrama, lugar donde prácticamente sólo se puede observar en la comunidad. También ha sido durante siglos diezmado por la presión humana llagando a subsistir en las umbrías más recónditas de nuestra sierra. Hoy en día es un árbol protegido y aunque todavía escaso, se está recuperando y ya crece sin la presión humana.
Para llegar a la Acebeda de Somosierra debemos tomar la N-1 carretera de Burgos y desviarnos al pueblo de La Acebeda, el desvío está señalizado unos 6 kilómetros antes del puerto, desde el desvío nos separan 4 kilómetros hasta el pueblo.
Una vez en el pueblo dejamos la iglesia a la derecha y continuamos hasta la salida donde comienza una pista de tierra, continuamos dejando otra pista a nuestra izquierda y un kilómetro más adelante encontramos un pilón a la izquierda y a escasos cincuenta metros una curva donde se puede dejar el coche. No hay mucho espacio, apenas un par de coches, aunque dado el poco tránsito de la zona, es posible dejarlo en cualquier sitio. Prácticamente todo el bosque está rodeado de una pared de piedra, se puede acceder directamente desde el coche por una senda que asciende al lado de un arroyo, o también se puede subir por una vía pecuaria que sube a la derecha del bosque, siempre pegada a la pared de lo delimita y que nos dejará en la parte más alta, desde aquí sólo tenemos que entrar en el bosque y descender, aunque dada la poca dificultad del terreno se puede deambular por todo el bosque arriba y abajo sin problema, simplemente ir buscando los acebos y los viejos robles mientras descendemos hasta encontrarnos con un arroyo que nos depositará en una pradera, cerca ya de la pista de tierra donde dejamos el coche. El recorrido no tiene más de tres kilómetros entre la subida y la bajada y el tiempo invertido dependerá de nosotros, pero aquí lo importante es ver, disfrutar y fotografiar lo que la naturaleza nos regala.
Luego a la vuelta podemos ver al pueblo de La Acebeda con la llamada Casa de la Peña construida sobre una gran piedra de roca viva por pastores de Horcajo de la Sierra, fundadores del pueblo. Junto a la casa se encuentra la iglesia parroquial de San Sebastián del siglo XVII y una fuente de 1945.
El pueblo es pequeño, 67 habitantes, y se recorre en poco tiempo, pero sus calles, sus casas rurales de piedra y su buena mesa son más que suficientes para que disfrutemos después de la corta caminata.
Casa de la Peña. La Acebeda.
Iglesia de San Sebastián. La Acebeda.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico: Pedro Alfonso
Me gusta el sitio y tus buenas fotos. Muchas gracias
ResponderEliminarMariano
Gracias a ti por seguir cada día al Zorro Corredero
ResponderEliminarUn saludo
Bonito reportaje... Pedro.
ResponderEliminarCómo luce el otoño !!!
Nines Alonso
Todo es bonito, la acebeda y el pueblo. No lo conozco pero me ha gustado mucho. Gracias por compartir.
ResponderEliminarAntonio C.
👏👏.. que zona mas bonita...y con las fotos tan chulas, casi ni hace falta ir.. jeje...y el muérdago.. joerrrrrr que maravilla...para adornar la Navidad...
ResponderEliminarJosé Antonio Álvarez Gallego de Guzmán
No es muérdago es acebo, el cual está protegido en toda la Comunidad de Madrid y por lo tanto no se puede recolectar ni en Navidad ni nunca.
ResponderEliminarPedro Alfonso Es acebo??.. pués...muy bien.... jeje...y el muérdago?...no sé no sé...a mí me suena que es muérdago...
ResponderEliminarJosé Antonio Álvarez Gallego de Guzmán
Que bonito Pedro cuanto sabes y nos hAces disfrutar a nosotros
ResponderEliminarJuani Lopez Conde
Qué bonitas fotos
ResponderEliminarPilar Diaz Recamal
Acerolas no??
ResponderEliminarCarmen Frontelo Morales
Nooo, nada tiene que ver, son frutos de acebo.
ResponderEliminarAunque quizá las hojas puedan llevar a confusión, el fruto del acebo tiene en su inicio un color verde que posteriormente pasa a rojo, mientras que el fruto del muérdago, que en un principio también es verde, cambia posteriormente a un color amarillento o blanco.
ResponderEliminarSegún la foto se corresponde al acebo . Muchas noches he pasado en una cabaña rodeada por acebos en la montaña asturiana, e incluso tenemos una "Sierra del Acebo".
Miguel Revuelta de Guzman
Preciosa la Sierra del Acebo de Cangas del Narcea, y maravillosas han tenido que ser tus noches en esa cabaña rodeada de acebos. Un saludo.
ResponderEliminarHermosa fotografía
ResponderEliminarAurora Ferrera Ruiz