miércoles, 15 de enero de 2014

San Juan de Ortega en el Camino de Santiago


                                               San Juan de Ortega ( Burgos )
                           



Este pueblo de poco más de 18 habitantes es un hito en el Camino de Santiago, y todo se lo debe al santo Juan de Ortega que no sólo dio nombre al pueblo, sino que además fue el verdadero artífice y arquitecto de los edificios que componen el patrimonio arquitectónico de este pequeño y visitado pueblo, final y comienzo de etapa en el Camino de Santiago, lugar donde el peregrino vive y se empapa de Camino.


    Calle de la Fuente en S.Juan de Ortega.


    Monasterio Iglesia de San Juan de Ortega


En este lugar lleno de religiosidad, belleza, paz y ambiente peregrino, contrasta el ajetreo del día con la llegada y salida de peregrinos con la tranquilidad y el sosiego de la noche, cuando queda en silencio y la soledad se apodera de todo. Es al anochecer el momento idóneo para pasear por la explanada de la iglesia y por su par de calles, para dejarse llevar después de un largo día de caminata y notar la paz interior y el recogimiento, roto solamente por el ladrido de algún perro asustado por nuestros pasos en la oscuridad de la noche.


    Iglesia de San Juan de Ortega

                   Escudo episcopal en San Juan de Ortega con las armas de Castilla y León.

Este santo burgalés nació en el año 1080 en Quintanaortuño, y fue durante su peregrinación a Tierra Santa cuando el barco en el que viajaba tuvo un percance que casi termino en naufragio. En esos momentos trágicos el santo se encomendó a San Nicolás de Bari, prometiendo que si se salvaba de morir en el mar le construiría una capilla en agradecimiento. Y así fue, cuando regreso a su tierra comenzó a construir la capilla en honor de San Nicolás dándole este nombre. Esta capilla fue la primera de sus obras. 


    Capilla de San Nicolás de Bari


                             Puerta de entrada a la iglesia monacal.


La iglesia monacal de trazado, cabecera y cruceros románicos se construyó a finales del siglo XII, siendo ampliadas las naves en el siglo XV en estilo gótico.

Al atravesar la puerta de entrada a la iglesia, lo primero que nos llama la atención es la luz, que de forma natural ilumina la piedra resplandeciendo la blancura que embellece todo el conjunto arquitectónico y monumental.


                           Interior de la iglesia y baldaquino.

    Ornamentos en el techo


    Sepulcro de San Juan de ortega


Se dice que San Juan de ortega llegó a tener varios sepulcros, lo cual servía para dar más ennoblecimiento al lugar y a su vez para confundir a los posibles saqueadores de reliquias. Este sepulcro sencillo y sin apenas adornos es el que contiene los restos del Santo, estando vacíos el del baldaquino. Todos ellos estuvieron en la capilla de San Nicolás y se trasladaron a la iglesia en 1964, uno al baldaquino y los otros dos a la cripta. En el año 2005 debido a unas inundaciones estos dos sepulcros se trasladaron a la iglesia. 




El retablo data de mediados del siglo XVI, representa el juicio final. Podemos ver figuras desnudas en actitud de suplica, las ánimas condenadas aparecen en la parte inferior, en el centro las del purgatorio. El la parte superior están representados los doce apóstoles con la Virgen y el Niño intercediendo por las almas y más arriba podemos observar a Cristo resucitado mostrando las llagas.


                             Baldaquino de San Juan de Ortega


Es el baldaquino isabelino del siglo XV lo primero que nos llama la atención nada más pasar la puerta. Realizado con piedra de Briviesca tiene una imagen yacente de San Juan de Ortega realizada en alabastro y en los costados seis representaciones en relieve con los milagros atribuidos al santo. Fue encargado en 1462 por los Condes de Haro.


    Imagen yacente de San Juan de ortega en el centro del baldaquino.






                           Exterior del ábside románico.


    Interior del ábside románico y baldaquino
                
 
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso

2 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho este reportaje de la iglesia de San Juan de Ortega, así como todos los que has publicado del Camino de Santiago. Están muy bien ilustrados

    Inés

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  2. Muchas gracias Inés por tu comentario.

    Un saludo
    Pedro

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