Un año más el otoño cadalseño nos vuelve a regalar escenas
llenas de color y de existencia, es la fuerza de la naturaleza la que con su
savia nos proporciona la belleza de nuestro siempre querido y amado valle del
Tórtolas.
Los días de otoño son cortos, a veces lluviosos o ventosos,
pero siempre están llenos de un atractivo que inunda de esplendor el paisaje
cadalseño. A veces estos lugares nos resultan tan cotidianos que casi no nos
llegan a producir ningún síntoma de expectación o encanto, es normal que esto
ocurra cuando casi a diario recorres un lugar sea de donde sea.
Pero en Tórtolas hay mucho más que paisaje, aquí está
encerrada una parte muy grande de la historia de Cadalso, es en este lugar, de
escasas dimensiones, donde muchos de los nuestros han vivido verdaderas
crónicas de su existencia, algunas de las cuales ya han quedado como testimonio
del ayer cadalseño.
Mantengamos Tórtolas con vida, porque sólo así alimentaremos
nuestro pasado y con toda seguridad nuestro futuro.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
juan carlos mendez andrade
ResponderEliminarHOLA BUENAS NOCHES PARA USTEDES AQUI EN CADALSO DE LOS VIDRIOS, MI NOMBRE ES JUAN CARLOS MENDEZ ANDRADE Y SOY DE
GUADALAJARA JALISCO MEXICO LA TIERRA DEL TEQUILA, ADEMAS SOY AMIGO DE UN CADALSEÑO LLAMADO PABLO CRESPO RASO, EL CUAL VIVE ACA EN GUADALAJARA Y BUENO HE VISTO MUCHAS COSAS BONITAS Y MARAVILLOSAS DE SU GRAN PUEBLO YO ESPERO PRIMERO MI DIOS VISITARLES Y LLEVAR A PABLO CRESPO PARA DISFRUTAR DE TODAS LAS TRADICIONES QUE TIENEN Y QUE SON SIMILARES DE AQUI DE GUADALAJARA .
BUENO CON ESTE CORREO ES EL PRIMER COMUNICADO PARA SEGUIR EN CONTACTO CON USTEDES
HASTA PRONTO GENTE BUENA Y LLENA DE AMOR POR SU TIERRA Y SU GENTE
Hola Juan Carlos, muchas gracias por escribir y por tu gran deseo de visitar Cadalso. Espero verte pronto por aquí junto a Pablo, excelente persona y gran comunicador.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Pedro Zorro Corredero
Bonito colorido otoñal en Tórtolas.
ResponderEliminarEL HUERTO DE COIMBRA
ResponderEliminarEn la paz de Coimbra cultivo un huerto
que a mis manos las ocupa y sosiega,
y a él y en él me hago esfuerzo y entrega
fecundando un edén floral ya cierto.
Con las plantas emitiendo un concierto
que un viento alado armoniza y despliega,
la Residencia de Ancianos se anega
de violines, su balconaje abierto.
Huerto en jardín de los postreros años
que abreviando incierto, aguardando espera
angustias, amores y desengaños
de mis sueños en pos de una quimera.
Riegos del huerto mitigan mis daños
en mí ocaso al sol de la primavera.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho