San Miguel de Viella..
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En el corazón del Valle de Arán, donde los primeros rayos del amanecer despiertan valles encantados y montañas altivas, se alza la iglesia de San Miguel de Viella, testimonio vivo del siglo XIII. Su piedra antigua guarda el eco de oraciones olvidadas, mientras la luz dorada se filtra por sus ventanales románicos, acariciando el interior. A su alrededor, el valle respira historia y misterio, los bosques susurran leyendas, sus ríos murmuran eternos viajes y las cumbres vigilan desde lo más alto. San Miguel de Viella no es sólo un templo, es un refugio del espíritu, un símbolo de la armonía entre la fe, la naturaleza y el paso lento de los siglos. El Valle de Arán es maravilloso.
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Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
Carlos Fabra Beltran
ResponderEliminarEstá es la que le callo un rayo
Aurora Ferrera Ruiz
ResponderEliminarBuenos días Pedro, ¡que tengas un día tan brillante como el sol en el Valle de Arán! que tengas un feliz día😍😍😍
Pilar Diaz Recamal
ResponderEliminarBuenos días feliz jueves
Maria Antonia Hernández
ResponderEliminarParece un castillo 🏰
Si, la torre tiene aspecto fortificado porque estuvo al lado del castillo, pero ya nada queda de este.
ResponderEliminarLa pátina de los años
ResponderEliminarla impregna con su vigor.
La lluvia le dio sus baños
y el sol le dio su calor.
ABCPremium
ResponderEliminarNo llegaron con la agricultura: los gatos domésticos a Europa a bordo de naves romanas
MI GATO ANDRÉS
Andrés se sube en la mesa
y me observa cuando escribo
leyendo cuanto describo
y de mirarme no cesa;
y nunca muestra sorpresa
si lo escrito no le gusta
o francamente disgusta,
pausado desciende Andrés
y el muy tuno entre mis pies
sueña con la gata Augusta.