jueves, 19 de mayo de 2022

TARDES DE ROJO. Por Miguel Moreno.

 Tardes de rojo

(El rojo siempre ha sido uno de mis colores favoritos. El otro día revisando viejos escrititos me encontré con éste, que me sorprendió con sentimientos encontrados. Lo escribí mentalmente una tarde de mayo que iba a los toros. Esa tarde reparé en que casi todo lo que aparecía ante mí era rojo o pintado de ese color. Al llegar a casa trasladé lo pensado al papel del ordenador. Con la distancia de los años comprendo que parte de aquel color rojo se fue desvaneciendo. Los colores van cambiando de matiz con el tiempo, como las personas con sus experiencias vividas se tiñen con la pátina de la edad. Creo que nadie es el mismo con 20, 40, 60 u 80 años. La vida no pasa sin dejarnos su huella pintada en la memoria y en el corazón…)

 TARDES DE ROJO


     Las tardes tienen múltiples matices y variantes del color rojo. Los atardeceres son para mí, fundamentalmente, siempre rojos y los del mes de mayo y septiembre se enseñorean por completo de mi espíritu dejando a la intemperie mi alma roja y herida.

      Todo es rojo: Rojo el metro y los autobuses rojos, rojo es el sol y las nubes son rojas, rojos los relámpagos y los truenos rojos, rojo es el amanecer y el ocaso es rojo, las banderas rojas y los tejados rojos se tiñen de rojo. La plaza de toros de Las Ventas es roja, rojas las tablas del ruedo y los carteles taurinos rojos, rojos los capotes y las muletas rojas, de grana (rojo) y oro los vestidos de torear y los ternos de a diario de angustia y rojo se adornan, rojas las corbatas y las banderillas rojas, rojos están los hombres y los monosabios van de rojo, sangre roja sobre el toro con divisa roja. Rojos los charcos coloreados de sangre roja, esa que nos hace creer que somos tan rojos como las luces rojas al caer la tarde roja. 


     Canciones tristes impregnadas de rojo y amapolas rojas en la primavera roja, los claveles rojos y los geranios rojos los ponían nuestras abuelas sobre el alféizar rojo de la ventana roja. Rojas las flechas de las bandadas de pájaros al igual que rojo es el infinito que surcan en los crepúsculos rojos. Rojos los lugares donde todo es conmovedoramente rojo, el rojo nada entiende de los intereses grises que carecen del rojo, tampoco entienden del material obscuro de las monedas que no son rojas. Siempre al rojo: Al rojo sublime y rojo hermoso de mi pueblo rojo.

 Rojo es el recuerdo que da sentido a la vida y la emoción nace roja en el rojo más profundo del ser humano, más hondo y rojo que la razón y la voluntad que son también rojas. Rojo es el corazón en el que me gustaría dar un golpe de estado rojo y así gobernara en su interior el cariño rojo y el respeto rojo, que tan necesarios son para el gobierno rojo de los hombres y mujeres de cualquier color rojo. Roja es la melancolía que es la patria roja del perdedor rojo y que hace que la soledad roja sea su única compañía roja deseable.


De rojo oscuro es el desamparo y rojo más claro es el anhelo rojo que aparece suspendido entre la roja inspiración y el sentimiento rojo. Los sueños son rojos para aquéllos que viven inmersos en una pasión roja tan roja como mi bicicleta que es más roja que la Cruz Roja. La vida roja es demasiado corta como para sentirla si no se la vive con fervor rojo, ella se parece a esos amores malditos y rojos que gotean una mirada o un gesto rojos capaces, por si solos, de redimirnos del infierno rojo del olvido. Tenemos amores rojos escondidos en el rincón más bello, intocable y rojo de la memoria, pero no conviene encontrarse con los viejos y apasionados amores rojos. Las cuentas rojas del corazón rojo nunca se acaban de pagar de tantos y tantos números rojos que atesoran.

      Todo es rojo en las tardes rotas y rojas de mi existencia roja atravesada por un dardo afilado de dolor rojo.


Miguel MORENO GONZÁLEZ
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso



9 comentarios:

  1. Buenos días Pedro bonita reflexión

    Aurora Ferrera Ruiz

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  2. Guapo 👏👏👏. Pedro el.. día 🍀🍀

    Maribel Jimenez

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  3. Un escritito muy rojo.
    Un abrazo... rojo, por supuesto.
    Luis C. Trijueque

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  4. Sé que los Cadalseños son muy aficionados a los toros, a la lidia, yo no lo soy

    Eugenia Del Castillo

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  5. Me gusta la música la gente, pero ya toro y torero lo paso mal...

    Eugenia Del Castillo

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  6. Ahora va a resultar que me sales rojillo.

    Javier Perals Samper

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  7. Se lo dices a Miguel, no? Tú sabes que yo nooooo. Abrazos.

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  8. He tenido unos días con un lío rojo intenso y no leído hasta hoy este escrito en rojo que denota maestria en su composición alrededor del rojo. Me ha gustado mucho.
    Pepe Vázquez

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  9. Qué bueno tu escrito rojo...más que bueno....no encuentro el calificativo...¿quizás QUINTAESENCIA DEL ROJO! Enhorabuena, Miguelón, de un viejo semifacha transmutado provisionalmente en ROJO.Gran abrazo. Diego S. Bustamante

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