Cadalso en otra dimensión
El hombre se acercaba a la cuadra, siempre a una temperatura ambiente, y cuando los animales le olían entraban en un estado de euforia, siempre era así, día a día, año tras años. La voz del amo era reconocida y agradecida, también su trabajo era reconocido por toda la familia y siempre recompensado con un buen trato y con comida en el pesebre. La mula araba, el borrico era el medio de transporte y el perro la compañía hasta las, a veces, lejanas viñas, los cuatro formaban un heterogéneo conjunto que cada día llenaba los caminos y las calles de Cadalso. Al atardecer, cuando la luz daba paso a la oscuridad de la noche, regresaban al pueblo con el deber cumplido, era el momento en el que los más pequeños nos asomábamos a la calle, para escuchar los avatares que nos contaban, siempre bien recibidos y muchas veces guardados en los más cercano de nuestro corazón, historias del campo y de los nuestros.
La cuadra era el lugar de echar de comer, de beber, y de cerrar para regresar al hogar caliente del fuego y esperar la cena, siempre rápida, los hombres se acostaban pronto porque siempre madrugaban mucho. Y mientras esto sucedía la vida iba pasando y los hombres envejeciendo, las caballerías desapareciendo y el campo, esto sólo tenéis que echar un vistazo para ver lo ocurrido. Menos mal que todavía hoy, en pleno siglo XXI, la vida nos sorprende con imágenes como esta, menos mal, pero hasta cuándo.
Cadalso me emociona. Buenos Días CADALSO.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
Buenos días Pedro!!🍀🍀
ResponderEliminarMaria Teresa Caballero Lopez
Buenos días Pedro Cadalso emociona pero tus Relatos A mi me llegan soy de pueblo gracias
ResponderEliminarAurora Frrera
Bonito relato que me hace retroceder a mi niñez. Pero todavía hoy, siento esa euforia de esos animales, pues cerca de ni casa, hay un señor que los tiene y cuando le barruntan, se ponen a relinchar locos de alegría. Un saludo amigo Pedro Alfonso.
ResponderEliminarVidal Fermosell Jimenez
Buenas tardes ,hace años el "MERA "tenía una borrica y en cuanto le barruntaba menudo se ponía 🤣🤣
ResponderEliminarLucia Lop
Pedro que recuerdos me trae la foto de muestra borrica Sandalia a la que toda la familia queria en especial nuestro querido padre...
ResponderEliminarLoren Alfonso Jeronimo
Que foto más bonita
ResponderEliminarJuani Perez
Buenas tardes
ResponderEliminarAngelines Cordero
Era una estampa hogareña
ResponderEliminarla mula, el perro, y borrico,
y la visión de la Peña
y en el campo era la enseña
del hombre cuando fue chico.
LA BURRITA FEDERICA
La burrita Federica
pasta por una pradera,
cuajada por la ajonjera
que su peso multiplica.
Pero su comida rica
como llovida del cielo,
es ponerla como anzuelo
para mantenerla atenta
y rebuznando contenta
el dulce de un caramelo.
IBAN MULAS MULERAS
Iban mulas muleras
de poderosas ancas,
cargadas de maderas
hasta las mismas trancas.
El barro les llegaba
hasta los corvejones,
cuando la uva llenaba
esparto de serones.
Cargaban sobre el lomo
jinete y vertedera,
y en la viña del pomo
romano de mancera.
En época de saca
los haces de los trigos,
y montones de alpaca
y las paseras de higos.
Después tirar de trilla
aparvando la parva,
del trillador la silla
y a mieses las aparva.
Acarrear el grano
y cargar con la paja,
cuando el sol del verano
con el sudor la alhaja.
Su estiércol aprovecho
para abonar los campos
que ilumina el barbecho
a la luz de los lampos.
Mulas, riadas de mulas
a hogar dieron sustentos
de frente o a reculas
de agros de Cenicientos.
SI HOMENAJE SE RINDIERA
A la mula en Cenicientos
Si homenaje se rindiera
a bestias de arada y carga,
una estatua ancha y larga
la mula se mereciera.
La viña lo agradeciera
y el barbecho en sus cimientos,
y los buenos sentimientos
de los coruchos de antaño,
del pastoreo y rebaño
de campos de Cenicientos.
El macho y la burra de vigardo
ResponderEliminarEduardo Alfoso
El corral de la Ramona
ResponderEliminarEduardo Alfoso
Segun algunos eso era maltratarlos y no se enteran que lo único que pensaban eran ser útiles a sus dueños y esa era su felicidad . No ahora encerrados en sitios para no salir jamás de el y lo más dolorosos para ellos * Sin poder serle util a nadie * 😥😥😥😥
ResponderEliminarJuan Carlos Romano Bajo
Que guapos!!💖
ResponderEliminarMaria Antonia Hernández
Muy bonitos recuerdos.. 👍👍
ResponderEliminarJosé Antonio Álvarez Gallego de Guzmán
En mí casa toda la vida hubo Borrico Manolo y después burro y mulas pero ya sin bautizar
ResponderEliminarAntonia Frontelo Morales
Muy bonitos recuerdos Buenas noches Pedro
ResponderEliminarAurora Ferrera Ruiz
Gente que quería y respetaba a los animales sin mediar interés alguno que no fuera el del agradecimiento por la labor realizada. No solían salir en los medios porque era lo más natural del mundo y tampoco les pagaban ni se lo agradecían asociación alguna. Eran otros tiempos, posiblemente más auténticos, al menos en la relación con los animales, que los actuales. Saludos
ResponderEliminarGerónimo Lucas Puente
Así es Gerónimo, entonces los animales, sobre todo las caballerías, formaban parte de la familia, eran queridas y apreciadas y se las cuidaba con mucho cariño, para que trabajaran en el campo y como medio de transporte, hoy se compran y se abandonan, y en algunas ocasiones son caprichos que duran hasta que les aburren. Es evidente que esta imagen no se repetirá mucho y que en pocos años muchos de estas caballerías dejaran de existir, de hecho creo que estas son las últimas que todavía subsisten en Cadalso.
ResponderEliminar