LECTURAS PARA UN VIRUS SIN CORONA. LA INSPIRACIÓN
Brigid. Diosa de la Inspiración en la Mitología Celta
La
inspiración brota maravillosa y creadora y no admite adornos superfluos. Los
humanos la poseen y se les manifiesta mediante sensaciones e inquietudes
íntimas. Es un sortilegio, limitado y escaso, que une inconscientemente a los
beneficiados y les convoca a una química que
va más allá de lo humanamente perceptible. Ella les hace más parecidos de lo
que exteriormente aparentan. Les interrelaciona dependiendo de la voluntad de
confidencia de cada cual: unos necesitan sacar a la luz sus obsesiones
interiores; otros, más introvertidos, no lo hacen y aún hay quienes las
muestran a través del diálogo sincero.
Inspiración
La
inspiración es una llama interior que muchas veces es ignorada por el propio
agraciado, está adormecida, como esperando que llegue alguien a decirle:
"¡Avívate y alumbra!" Bajo su influencia sus receptores actúan de
manera bella pero desconocida y ocasiona que, al meditar en lo realizado, les
sorprenda lo hecho. Es algo que no controlan, que no poseen fuerza racional
sobre ello. Es un viaje de ida y vuelta que va directo a entroncarse con los
sentimientos, sorprendiendo a sus viajeros en lo más recóndito y dejándoles
después confusos y dependientes. Es un halo libre e invisible que pulula
caprichoso al azar, ajeno a la menesterosidad de quien lo busca. Algo inaudito
que lleva en su propia indefinición un encanto que sólo puede juzgarse mediante
la abstracción, grácil y volátil, que provoca el sueño.
La
inspiración es una cosa hallada de pronto y no-buscada con esfuerzo, es un
eficaz y singular estímulo que genera una creatividad espontánea que ilumina el
alma. ¿Qué es el alma? ¿Cómo es esa luz que la ilumina? Nadie lo sabe. Todo lo
más se llega a intuir mediante conjeturas. Sólo puede explicarse desde la
óptica subjetiva de lo misterioso. Nada hay más desconocido que esa eternidad
divina, superlativamente grata y placentera, que todas las religiones sin
excepción predican. A esa especie de soplo divino se parangona siempre la
inspiración. No puede compararse con nada tangible y humano. Tal es su inefable
hermosura.
La Musa Cadalseña de Miguel
La musa es
la parte ambivalente, mitad quimera mitad realidad, de la inspiración. La musa
puede tener de real el cuerpo, el resto es configuración imaginaria que el
autor adapta a su talle. Hay musas e inspiraciones que se confunden con las
auténticas. El ingenuo recurre a ellas desconocedor de que las manda la
omnipotente providencia y no el deseo humano. La inspiración es una bolita
creadora que recibe el elegido y guiada no se sabe por quién. Sé de personas
que fueron sorprendidas una sola vez con su visita y envejecen esperando y
anhelando su retorno, haciendo de su vida una permanente ilusión. Hablan a sus
allegados de algo parecido a la felicidad...
Miguel MORENO GONZÁLEZ
Muy interesante pero te tienes que centrar. Mucho al leerlo ti lo recomiendo está muy interesante
ResponderEliminarAurora Ferrera Ruiz
Buenos dias
ResponderEliminarAurora Ferrera Ruiz
Que mágico debe ser encontrar esa inspiración. Encontrar esa musa o musas que la provoquen. Así es el arte. Por eso los escritores tienen tantas vivencias, amigos...Porque resultan inspiradores para ellos. Tú Miguel tienes mucho arte por lo que no te falta inspiración y quien te la provoque.
ResponderEliminarOjalá sigas inspirado, me ha gustado bastante. Ánimo.
ResponderEliminarAgustín
Bonita reflexión...
ResponderEliminarPepe
Tendrías que publicar una compilación de todos tus escritos Miguel!!��������
ResponderEliminarEugenia