sábado, 14 de marzo de 2020

La luz que ilumina Cadalso siempre estará con nosotros.


Una casa de San Antón, un lugar de nuestra vida..



El día ha pasado, es el primero de unos cuantos que debemos soportar con paciencia y colaboración. La noche inunda las calles, todas, las de San Antón, Iglesia, Sangre o Corredera, todas pierden la luz a la vez, pero también en ellas se reflejan los colores de la noche, no menos bellos que los del día. Las caras que esculpen la desilusión desvelan el momento que nos ha tocado vivir, nunca esto antes ocurrió, y algunos ante tanta desprotección  lo asemejan a tiempos de guerra, de la nuestra, la civil.
Hoy todo es inédito y en muchos casos amargura, nuestra condición ahora es frágil, y toda esa fortaleza que creíamos tan nuestra se ha esfumado con una sola palabra, Coronavirus. No, no tengamos miedo, sólo precaución, porque la vida y la personas siempre estuvieron unidas y seguro que saldremos adelante, seguro. Miradas expectantes, como esperando una mejor comprensión de la situación, desazón en nuestro ánimo, y sentimientos marcados en las caras de desconcierto y asombro son hoy el reflejo de todos. A veces una imagen nos transporta, cuantas veces hemos dicho esto, pero es cierto que recrearnos y dejarnos llevar nos ayuda a salir del agujero, a sentir que todavía., como esta antigua casa de San Antón iluminada por un farol, estamos en pie y vamos a seguir adelante, con precaución y normas, pero sin miedo y con la ilusión de que mañana la luz volverá a nosotros y también a esta humilde y centenaria casa de San Antón, un barrio de Cadalso, un lugar de nuestra vida. 

Feliz noche a todos.


Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso


26 comentarios:

  1. Que Bonito se ve el farol muy interesante

    Aurora Ferrera Ruiz

    ResponderEliminar
  2. Preciosa la foto y el texto muy acertado,todo pasara,toca tener paciencia y confianza,buenas noches.

    ResponderEliminar
  3. Así es Zorro, tu si sabes dar en el clavo de lo cadalseño. Gracias

    Mariano.

    ResponderEliminar
  4. Pedro Alfonso Precioso Relato buenas noches

    Agustín Capitán Sanchez

    ResponderEliminar
  5. La casa de la Seve la inda y la más vieja la de su madre la tía Sole

    Dolores Saez Canoyra

    ResponderEliminar
  6. Buenas noches Pedro, te voy a decir que mi padre me dijo en una ocasión que me acordara y que estábamos muy bien pero que alguna vez podrian venir tiempos malos, y quizá una guerra, me quede incrédula en sus palabras no entendía, y el me dio una explicación,... Y como es la primera vez que nos pasa esto Coronavirus, y estár en casa es lo mejor que se puede hacer, no poder visitar a casa de un amigo a no ser que lo necesite por necesidad. Es lo que me da miedo, tanto contagio una pandemia mundial.

    Chelo Villarin Recio

    ResponderEliminar
  7. Por cierto que bonitas las casas con el farol.se han oído aplausos, yo también sali a aplaudir

    Chelo Villarin Recio

    ResponderEliminar
  8. Buenas noches Pedro y que tengamos un buen retiro

    Pilar Lopez Navarro

    ResponderEliminar
  9. Juntos, pensando en los demás, saldremos adelante. Gracias por tus palabras Pedro.

    Museo Etnologico Puerto Seguro

    ResponderEliminar
  10. Buenas noches amigo felices sueños

    Mayka Rg

    ResponderEliminar
  11. El brillo de la farola
    tiene su fascinación,
    parece decirnos:¡Hola!,
    y ponerle su vitola
    a calle de San Antón.


    IBAN MULAS MULERAS

    Iban mulas muleras
    de poderosas ancas,
    cargadas de maderas
    hasta las mismas trancas.

    El barro les llegaba
    hasta los corvejones,
    cuando la uva llenaba
    esparto de serones.

    Cargaban sobre el lomo
    jinete y vertedera,
    y en la viña del pomo
    romano de mancera.

    En época de saca
    los haces de los trigos,
    y montones de alpaca
    y las paseras de higos.

    Después tirar de trilla
    aparvando la parva,
    del trillador la silla
    y a mieses las aparva.

    Acarrear el grano
    y cargar con la paja,
    cuando el sol del verano
    con el sudor la alhaja.

    Su estiércol aprovecho
    para abonar los campos
    que ilumina el barbecho
    a la luz de los lampos.

    Mulas riadas de mulas
    a hogar dieron sustentos
    de frente o a reculas
    de agros de Cenicientos.


    SI HOMENAJE SE RINDIERA
    A la mula en Cenicientos

    Si homenaje se rindiera
    a bestias de arada y carga,
    una estatua ancha y larga
    la mula se mereciera.
    La viña lo agradeciera
    y el barbecho en sus cimientos,
    y los buenos sentimientos
    de los coruchos de antaño,
    del pastoreo y rebaño
    de campos de Cenicientos.

    ResponderEliminar
  12. A los conductores del Gato en la crisis del coronavirus.

    Siguiendo su itinerario
    sale el Gato en Cenicientos,
    el conductor con su horario
    cumple con su calendario
    expuesto a los elementos.


    Poblaciones de la ruta;
    de Cadalso en adelante
    Villa del Prado ejecuta,
    y la Aldea sin disputa
    tiene playa fascinante.


    Villamanta está desierta
    Navalcarnero aburrido,
    Móstoles la puerta abierta
    Alcorcón la tarde incierta
    y Madrid se halla afligido.

    ResponderEliminar
  13. El Consejo de Ministros
    expuesto está a los contagios,
    pues nos dicen sus registros,
    que Iglesias sin suministros
    es un barco de naufragios.

    ResponderEliminar
  14. De Ministros el Consejo
    tiene un docto Presidente,
    y dicen; ser el reflejo
    de un desquebrajado espejo,
    que nos lance a la pendiente.

    ResponderEliminar
  15. La Peña, Peña Buvera
    cómplice de la Muñana,
    nervios al virus altera
    y la Muñana a la espera
    lo agarrota en su ventana.

    ResponderEliminar
  16. ES TU CALLE SIN SALIDA

    Es tu calle sin salida
    donde me suelo perder,
    y después no sé volver
    al llegar la despedida.
    A tu cintura ceñida
    con ambas manos la tengo,
    y presiento que sostengo
    de tu respirar el hálito,
    que se ha convertido en hábito
    con el que yo me mantengo

    ResponderEliminar
  17. EN TU CALLE SIN SALIDA

    En tu calle sin salida
    a quien tapa el malecón,
    yo dejé mi corazón
    y con él dejé mi vida.
    La mar hizo una barrida
    arrojándome en tus brazos,
    y sus olas fueron lazos
    que me lanzaron a ti,
    y el amor vino hacia mí
    como un mar de los Sargazos.

    ResponderEliminar
  18. Es labor endemoniada
    el gestionar esta crisis,
    se impone nueva cruzada,
    nunca huyendo en desbandada
    como antaño por la tisis.


    SIN REPOSO Y SIN MEDIDA

    Sin reposo y sin medida
    fue tu cántaro a la fuente
    sin calmar tu sed ardiente
    ni tu ambición desmedida;
    y al final ya de tu vida,
    y libre ya de sofoco,
    dices haber sido un loco
    y tarde haber comprendido,
    pero por fin asumido
    que necesitabas poco.

    ResponderEliminar
  19. Cuando en mi Parnaso arranco
    al amarillo pajizo,
    un superficial barranco
    es compartimento estanco
    y la cama de un erizo.


    EL OLOR DE LA YERBA
    A Teresa

    Cuando la lluvia humedece
    a la yerba en la pradera,
    a los campos fortalece
    y el arroyuelo se crece
    desbordando su ribera.

    Cuando la yerba florece
    emergiendo en primavera,
    mi espíritu se enardece
    en tanto a mi alma estremece
    con su mágica bandera.

    Cuando el agua prolifera
    sobre tu ameno jardín,
    en tu cara reverbera
    las aguas de la reguera
    y te perfuma el jazmín.

    Cuando la yerba pisamos
    maceros de una ilusión,
    y si de la mano vamos
    el latido acompasamos
    corazón a corazón.

    Cuando a la yerba el calor
    a las hojas va secando,
    impreso en ti veo amor
    ir de nuevo en tu interior
    el herbazal germinando.

    Cuando a la yerba segamos
    y alpacas hacemos de heno,
    si a los ojos nos miramos
    ya sabes que hallas y hallamos
    de amor nuestras trojes llenos.


    EL AGUA DE MI REGUERA

    El agua de mi reguera,
    llegado desde tu fuente,
    hace de mí ser afluente
    que desagua en tu pradera.
    Orillando tu ribera
    me dirijo hacia tu encuentro
    y vislumbrado tu centro
    confluyo en tu carballón,
    y soy la fecundación
    que te ha regado por dentro.

    ResponderEliminar
  20. Mosaico de florecillas
    camino de mi Parnaso,
    blancas, rojas y amarillas
    guiadas por campanillas
    me vienen saliendo al paso.

    ResponderEliminar
  21. Gracias por los mensajes, la luz sigue estando encendida en nuestros hogares y pronto saldremos de esta extraña situación. Saturnino, nadie como tú sabe regar los momentos amargos con bellos poemas.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  22. Con tu permiso Pedro he guardado esta imagen que me transporta a mi niñez cuando iba con bastante frecuencia a Cadalso. De hecho así recuerdo la calle de Santa Ana (allí tenía su casa mi bisabuela Mónica), o esta misma calle de San Antón donde, arriba del todo, vivía mi tío abuelo Felipe.
    Este viernes pasado aún hablaba con un amigo sobre el cielo estrellado de Cadalso.

    Miguel Revuelta de Guzman

    ResponderEliminar
  23. Gracias por seguir conectado a Cadalso con tus recuerdos. La calle de tu abuela era la calle del Coso, pero como ya dije a tu hermana, todos hemos llamado calle de Santa Ana a la del Coso. Tienes permiso para coger y compartir todo lo que desees. Ya buscaré alguna foto de la calle del Coso y la pongo.
    Un saludo y suerte en todo.

    ResponderEliminar
  24. Muy agradecido. También sabía que era la calle del coso porque así se lo oía decir a mi madre.

    Miguel Revuelta de Guzman

    ResponderEliminar
  25. Pedro Alfonso Preciosa fotografía buenos días

    Agustín Capitán Sanchez

    ResponderEliminar
  26. Todo va a salir bien y nos abrazaremos con más ganas

    Maria Montes

    ResponderEliminar