jueves, 29 de noviembre de 2018

La vida es un regalo, María de Villota. Por Miguel González



LA VIDA ES UN REGALO





Solía participar en las San Silvestres Vallecanas y una tarde luminosa de San Isidro caminaba a la salida de los toros por la madrileña calle de Alcalá, a la altura de la antigua cafetería De Torres. La vi pero no me percaté de quién era, únicamente se diferenciaba del resto de los transeúntes porque llevaba un parche de un azul celeste intenso en su ojo derecho. Cuando la rebasamos fue Paloma quien me dijo al oído, bajito, para que nadie lo oyera: Creo que esa chica es la piloto de Formula 1, Maria de Villota, que hace poco tuvo un accidente probando un bólido en Reino Unido. Efectivamente, ella era quien iba en animada charla con una mujer joven que le acompañaba.



He acabado de leer hace un rato su libro, La vida es un regalo. Y un regalo conmovedor ha sido para mí su lectura de la que entresaco las siguientes frases:



-“Mira qué atardecer, no hay sol, pero la luz de plata del Cantábrico es preciosa.”



-“Aún tengo mucho que expresar con este otro ojo, aunque pase vergüenza.”



-“Frente al espejo, sin parche me cuesta mucho verme.”



-“Siento que tengo la cabeza de un adulto con la sensibilidad de un niño.”



-“Ahora no me gusta ver la violencia en las películas, me impacta más que antes.”



-“Valoro mucho más una mirada que un diamante.”



-“No creo en la frase, Lo que no te mata te hace más fuerte. Tú te haces más fuerte cuando no te centras en lo que te mata.”



-“¡Estoy aquí! ¡Cuánto me hubiese perdido! ¡Cuánto hubiese dejado por hacer!”



-“Rezo cada noche por los que han sufrido como yo y no se sienten fuertes, y siento que la vida es un ratito, un regalo, que hay que tomársela muy en serio porque ni siquiera nuestra vida es nuestra. Somos tan pequeños…”



-“Un día te das cuenta de que vivías dormido, pasabas a ciegas y sentías a medias. Si un accidente no ha parado en seco tu vida, vive soñando, pasea observando y ama apostando.”



-“¡Sonríe, por Dios! O por quien tú quieras, pero sonríe, porque hoy estás aquí y te queda mucho por vivir en este día.”







-“A mi madre. La más dulce y generosa. Te recompensaré aquel susto con amor.”



-“A Juan José Padilla, porque la palabra valentía se queda pequeña cuando acompaña tu nombre, pero es aún más sorprendente la naturalidad con la que la manejas en tu vida. Desearía saber torearla como tú.”



-“-“No he escrito este libro con mi puño y mi corazón para reivindicar mi vida, sino la vuestra.”



Algunos de sus amigos y su propio padre, Emilio de Villota, le regalaron a María sus frases más hermosas:



     -“Ha nacido una María renovada cuya estela iluminará aún con más fuerza tu pasión por este deporte, y sobre todo a muchas vidas truncadas que conseguirán nuevos logros, porque no sabían que eran imposibles.” (Emilio de Villota).



            -“María de Villota fue para la sociedad y para los deportistas un ejemplo de superación.” (Rafael Nadal).



            -“Te levantaste mucho más deprisa de lo que caíste.” (Fernando Alonso).



-“¡Qué guapa eres!” (Carlos Sainz).



-“Ahora su vida ya no se mide en milésimas, se mide en sonrisas.” (Jaime Alguersuari).



-“Tú estás ahora mismo en la “pole position” para ganar la carrera de tu propia vida.” (Juan José Padilla, torero,).



Hace unos otoños falleció María de Villota Comba en el Hotel Sevilla Congresos (España), a causa de las secuelas del accidente automovilístico que sufrió en Cambridgeshire (Reino Unido), el 3 de julio de 2012. Este año, como los anteriores desde que murió, sólo podrá participar en la San Silvestre Celestial y en la que se celebra siempre en los corazones de los niños a los que enseñaba a correr y a jugar los juegos infantiles de siempre. 



          



                Recopilado por: Miguel Moreno González


5 comentarios:

  1. Qué poquita cosa somos sin ellas, querido Miguel..

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  2. BUSCANDO EL VIENTO CÁLIDO DEL DÍA

    Buscando el viento cálido del día
    lentamente ascendí por la ladera,
    en un día con sol de primavera
    en que la faz de Dios me bendecía.

    En redor una brisa de armonía
    celeste descendía de la esfera,
    permitiendo que en mi alma se impusiera
    una paz interior que no extinguía.

    Llegándome el olor de los jarales
    y el resinar que emana de los pinos,
    vi creación de Dios y en sus caminos

    tempestuosos, y, con días sin males
    cercano el final al fin he concluido
    que lo compensa todo haber nacido.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  3. Tuve el honor de hacer el servicio militar , con su padre Emilio de Villota en Valladolid y en la base aérea de Torrejón de Ardóz , entonces corría en renault 8 ts , hicimos muchas guardias juntos . Enorme como persona y excelente compañero .

    Manuel Olarte Olarte

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  4. D. E. P

    Chelo Villarin Recio

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