Las cumbres, el viento, la amistad......
Los días de nieve y lluvia son el mejor tiempo de invierno
Sólo un kilómetros no separa del Mirador de las Canchas el inicio de la pista forestal, hoy evidentemente toda cubierta de nieve. Todo este último trozo no tiene muchos desnivel, pero no deja de ser en subida hasta el mismo mirador. Ya en el mirador, un espléndido lugar para comer algo y disfrutar del paisaje, el cielo se abre algo y podemos observar las cumbres cercanas de la Maliciosa, el Peñotillo y las Guarramillas, que juegan con las nubes.
Subir nevando, con poca visibilidad y llegar hasta aquí para que el tiempo nos regale esta magnifica vista del Valle de la Barranca, es tener suerte, es sentir que la montaña te envuelve y se entrega, así puedo asegurar que uno se siente privilegiado, porque no en todas las ocasiones paso esto.
Comer, fotografiar, hablar de otras travesías a las cumbres que desde aquí se divisan, es nuestro pasatiempo en la media hora que aquí compartimos. Y al final, como siempre, llega el momento de bajar, de regresar, y cuesta, más las jornadas como hoy donde la sensación de estar integrado es tan placentera. Para el regreso lo más interesante es seguir la pista, haciendo el recorrido circular.
Ha dejado de nevar, y aunque arriba soplaba el viento levantando la nieve, nada de esto sucede a medida que descendemos por la pista totalmente nevada y de aspecto invernal. Sólo hace falta seguir la pista, siempre en descenso para llegar de nuevo a los dos embalses llamados de Navacerrada el más cercano al aparcamiento y del Ejercito del Aire el siguiente. Desde esta pista también sale la subida al Collado del Piornal pasando por la Fuente de la Campanilla, que dejamos a nuestra izquierda, pero ocurre que por esta zona, y siempre para tardar menos, "trochamos", mira que me gusta esta palabreja tan gredense, y casi sin darnos cuenta estamos de nuevo junto a nuestro medio de transporte. Y lo que es más curioso, en tan sólo una hora vemos otras torres, esta vez no de piedra cubiertas de nieve, esta vez de cemento y cubiertas de cristal, las cuatro torres Bussines Área, estamos en Madrid. Increíble como se puede pasar de un medio a otro en tan poco tiempo y escasos kilómetros, realmente increible.
En total pueden ser unos diez kilómetros de distancia y unos 400 metros de desnivel, el tiempo varía mucho según la época, en verano, puedes hacerlo en unas dos horas y media, en invierno y con un día como hoy, de tres a cuatro, disfrutando y con fotos incluidas.
Recomendado con niños en primavera-verano, ésta no de momento porque todavía queda mucha nieve, y sigue nevando.
Y para terminar un regalo en forma de poema de Saturnino Caraballo, el Poeta Corucho.
Por la blanca inmensidad
Pedro va con las raquetas
y goza de libertad
sin tener las piernas quietas
Guarramillas, Peña Cabrita, Buitreras, Collado del Piornal, Maliciosa y Peñotillo
El viento levanta la nieve
La amistad de montaña, siempre ha sido así.
La Maliciosa y el Peñotillo
Mirador de las Canchas
Peña Cabrita
Collado del Piornal, izquierda Peña Cabrita, derecha las Buitreras
Cuerda de las Buitreras, Maliciosa, Peñotillo y Cuerda de los Almorchones.
Regresando....
La Maliciosa
Arroyo de Peña Cabrita
Peñas de la Barranca y Peñotillo
Peña Cabrita
Embalse del Pueblo de Navacerrada
El Peñotillo
Cuerda de las Buitreras
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
