Torres de nieve, sorpresa en el Cerro Casillas
Llegando al puerto el sol acaricia.....todo un placer en la montaña.
Subes, todo está impresionante, la noche anterior nevó y mucho, miras a los lados, el sol hace rato que comenzó a acariciarte, disfrutas de la montaña, del precioso día y de esta maravillosa vida que nos han regalado. Siempre que caminas por las cumbres el tiempo de la infancia se remueve en tu cerebro, más si estás en esta cercana cumbre a Cadalso, donde las imágenes del pasado invaden la memoria. La montaña sigue, a pesar de los años, estando ahí, pero aquellos años, los de abajo, ya no son lo mismo, y es que antes la infancia duraba, tardábamos mucho en hacernos adolescentes y bastante más en llegar a la juventud, a partir de la cual todo iba más rápido, el tiempo y nuestra vida volaba, y hoy muchos años después aquí estamos, ascendiendo al Cerro Casillas que nunca me dejó desolado, más bien inmenso de suspiros y sueños, y más cuando arriba estaba la sorpresa, esta vez en forma de torres de nieve helada, la próxima Dios dirá.
A Joaquín, que siempre está cuando le necesito.
Atrás quedó el puerto.
Y arriba la sorpresa, torres de nieve helada que la naturaleza nos regaló por momentos, todo fue tan efímero.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
Todo es una preciosidad, la nieve caída, el paisaje, naturaleza en estado puro, y al final, arriba como tú dices, la sorpresa. Que maravilla de torres, una composición casi de obra de arte de nieve y viento. Muchas gracias Pedro por traernos hasta casa estás obras de la naturaleza. Que nunca acaben tus pasos ni tu generosidad.
ResponderEliminarInés
Muchas gracias Inés, espero y deseo seguir caminando muchos años más por las montañas, seguir viviendo el día a día con la naturaleza y por supuesto continuar con el Zorro Corredero.
ResponderEliminarUn saludo
Buenas fotos Pedro.
ResponderEliminarMariano.