LA CASTAÑA DE CASILLAS
Es un estuche el erizo
cuya joya es la castaña,
extendido en la montaña
que jamás se muestra huidizo.
Y tiene un color pajizo
amarillo igual al oro,
su crepitar es sonoro
en el silencio nocturno,
y en su despertar diurno
de Casillas gran tesoro.
El Poeta Coruccho
Ricas
ResponderEliminarAna Diaz
LA CALBOTÁ
ResponderEliminarAntigua tradición del pueblo corucho, ya desaparecida
La sartén con agujeros
lista para la ocasión,
entreactos lisonjeros
de coruchos castañeros
teniendo a mano al porrón.
Con ascuas rojas la lumbre
y contención en la espera
y no sentir pesadumbre
y si tercia hasta una azumbre
de la cepa coruchera.
Pues aunque fuera incorrecta
la educación imperante
do política correcta,
entonces era perfecta
en mesa el vaso delante.
Con vino nos destetaban
a los infantes coruchos,
y alcohólicos se daban
no más que se encontraban
en fondas y en cafetuchos.
Oíamos los chasquidos
de castañas al asarse
y eran música y latidos
despertando los sentidos
de castañas al tostarse.
Y el tenue golpe a la tapa
y ver la mano que mece
y el primor cuando destapa
y el placer que al niño atrapa.
y papilas humedece.
Y el humeo que desprenden
las doraditas castañas
sensaciones que se prenden
y es algo que bien comprenden
las brisas de las montañas.
Y en la noche de difuntos
plagada de sentimientos
la Calbotá y sus conjuntos
aunaban a todos juntos
familias en Cenicientos.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho