Fronda del árbol que ante el templo vive, en donde el sol naciente se derrama, y el mirlo trémulo que está en la rama, canta a la noche en trinos su declive.
La Virgen del Alba con él convive y el dulce canto la complace y ama y el mirlo encendido en gloriosa llama, le ruega al día que avanzando avive.
Y emprende el mirlo en búsqueda afanosa entre el brezo, el rosal y entre la rosa, que rodea la valla y la piscina,
del Parque Mayor ramitas de un nido, que un nidal será sublime y florido con la Virgen que oficia de madrina.
EL MADRINAZGO DE LA VIRGEN DEL ALBA
ResponderEliminarFronda del árbol que ante el templo vive,
en donde el sol naciente se derrama,
y el mirlo trémulo que está en la rama,
canta a la noche en trinos su declive.
La Virgen del Alba con él convive
y el dulce canto la complace y ama
y el mirlo encendido en gloriosa llama,
le ruega al día que avanzando avive.
Y emprende el mirlo en búsqueda afanosa
entre el brezo, el rosal y entre la rosa,
que rodea la valla y la piscina,
del Parque Mayor ramitas de un nido,
que un nidal será sublime y florido
con la Virgen que oficia de madrina.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho