Hayedo de Montejo, un sueño que deja huella.
Recorrer el Hayedo de Montejo es casi un sueño, no importa la estación que se elija porque en todas ellas al hayedo nos sorprenderá con imágenes y momentos inolvidables, pero si nos decidimos por la estación otoñal, por cierto la época de más visitas, nos encontraremos con todo un mundo de color y belleza otoñal, aunque al ser la época de más visitas es la más complicada ya que el hayedo no permite visitas por libre, siempre con guía y con reserva, así que es posible que después de desplazarnos hasta allí, no se nos permita la entrada.
Lo mejor es reservar en el teléfono 91 869 7058 o estar a primera hora en el Centro de Recursos e Información Reserva de la Biosfera Sierra del Rincón. C/ Real, 64. Montejo de la Sierra. Horario: 9,30 a 15,00 horas. Las reservas se reparten al 50%, lo que quiere decir que si madrugamos y estamos de los primeros en la cola del Centro de Recursos tenemos asegurada la visita, esto para el otoño, el resto del año es más fácil
La visita, acompañado de un guía que va explicando todo lo referente al hayedo, suele durar una hora, pero aunque parezca poco tiempo, además de escuchar se puede fotografiar lo que vamos viendo, da tiempo y seguro que sorprenderá a más de uno, mucho más si es tu primera vez en el hayedo.
Esta visita se realizó el 10 de noviembre pasado con un tiempo espléndido y no mucho frío, haciendo el recorrido con tranquilidad y con una enorme sorpresa, encontrarnos con dos de los personajes más unidos al Hayedo de Montejo, me refiero a Antonio López Lillo, Ingeniero de Montes que ha dedicado, y lo sigue haciendo, muchos años a la protección y conocimiento de la Sierra del Rincón, y más especialmente al Hayedo de Montejo. Le acompañaba otro personaje que nunca falta en el hayedo, un hombre al que se le conoce como "El Poeta del Hayedo", y que no es otro que el conocidísimo paisano, nacido en el cercano pueblo de Montejo de la Sierra, de nombre Rafael de Frutos Brun que con sus 89 años visita casi a diario el hayedo desde que su padre la llevara por primera vez cuando era un niño, entonces para trabajar y hoy para recitar poesías que él mismo escribe, y que suenan a cantos celestiales en la espesura colorida del otoño. Este día Rafael nos deleitó con una preciosa poesía sobre un padre y un hijo, vecinos de Montejo, que con su mula se internó en el hayedo para cortar leña, teniendo la mala suerte de morir al caerle encima un acebo, ya de noche y al ver que no regresaba el padre fue a buscarle y no pudo encontrarle, sólo el canto de un búho le hacía creer que era su hijo que le llamaba, hasta que al amanecer encontró las huellas de la mula que regresaba a casa y siguiendo sus pasos al contrario llegó hasta el lugar donde yacía su hijo muerto. Al terminar la poesía nos habló de la familia del joven fallecido, de su pueblo y del mismo hayedo, no fueron más de 15 minutos, pero era tan amena y tan ligada al hayedo las palabras de Rafael que todos los allí presentes disfrutamos y comprendimos, más si puede, la vida de este enclave, hoy lugar de visita y en el pasado de trabajo para los habitantes de Montejo. Un auténtico placer haber conocido a estos dos hombres llenos de bondad y amor al bosque.
Después la visita continuó, senda adelante fuimos descubriendo las hayas, los robles, cerezos silvestres, serbales, avellanos, abedules algunos acebos, el brezo y la maravilla del agua del Jarama que nos acompaña en nuestro caminar con su ruidoso discurrir, mientras nuestros pasos producen ese chasquido tan agradable de las hojas secas al pisarlas, que acompañados del ruido de las aguas y de las hojas movidas por el viento, hacen que el paseo sea una delicia para todos nuestros sentidos. Aquí en medio del hayedo, se ve, se huele y se oye la naturaleza, llevándonos hasta un estado de placer que nos hace recapacitar para que el Hayedo de Montejo sea siempre un lugar protegido.
En la actualidad, es un Sitio Natural de Interés Nacional y Reserva de la Biosfera, pero se está intentando el reconocimiento como Patrimonio Natural de la Humanidad de la Unesco, pero mientras este reconocimiento llega, si es que llega, el hayedo seguirá recibiendo visitas restringidas para evitar su deterioro. Hasta el año 1989 estaba permitido el paso, yo le he hecho en varias ocasiones, unas desde la actual entrada por una pared medio derruida, y en otras veces bajando desde el Santuy o el Cerrón, cumbres de la cercana Sierra de Ayllón. En total unas 25.000 personas visitan al año el restringido Hayedo, y así debe continuar para salvaguardar y proteger su flora, su fauna y toda su riqueza natural.
Antonio López Lillo, Ingeniero de Montes defensor de la Sierra del Rincón y del Hayedo.
Papel en mano Rafael de Frutos nos recita una sus poesías en medio del hayedo. Un lujo.
Una de las hayas más vieja.
Haya de la Roca
Fuente en mitad de la senda.
Río Jarama
Micenas
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro alfonso
Otro bosque más que nos muestras. Precioso en otoño, Gracias
ResponderEliminarMariano
El Hayedo de Montejo está precioso durante todo el año, algo más de color en otoño, pero digno de visitar en cualquier estación.
ResponderEliminarGracias
Un saludo
Precioso!!!
ResponderEliminarFernando Muñoz Jimenez
No no lo conoces? La próxima visita te aviso.
ResponderEliminarNo sé si responderán mis rodillas, a no ser que se llanee sobre todo. Hace años pensé en ir, después pusieron cupo y se me quitaron las ganas. Conozco el de la Selva de Irati, que es espléndido. Gracias, lo intentaría. No sé si responderán mis rodillas, a no ser que se llanee sobre todo. Hace años pensé en ir, después pusieron cupo y se me quitaron las ganas. Conozco el de la Selva de Irati, que es espléndido. Gracias, lo intentaría.
ResponderEliminarFernando Muñoz Jimenez
La senda es toda en llano, no lo notas. El de Irati es una maravilla, más grande que este y con muchas más hayas.
ResponderEliminarEl Hayedo de Montejo
ResponderEliminares de España maravilla
es el otoño que brilla
y de Madrid un espejo.
Pedro Alfonso hace un bosquejo
del hayedo intemporal
que siempre es subliminal,
observarle con gran calma
para gran solaz del alma
y de un paseo ideal.
Amigo Pedro, está escrito sobre la marcha y a golpe de inspiración.
Saturnino Caraballo Díaz
Bello poema amigo Saturnino.
ResponderEliminarMuchas gracias Saturnino. Un abrazo
ResponderEliminarEL ÁRBOL MORTUORIO DE LA CAJA
ResponderEliminarTe escribo un soneto haya de mi caja
crecida en el hayedo arborescente,
pues has de mitigar fuego en mi frente
con el helado helor de tu mortaja.
Hendida por el hacha que destaja
cuando te vea anciana decadente,
me acogerá tu inercia indifente,
en tu interior madera ya en rebaja.
Sin compartir la vida y si el destino
nos condenan a ser desconocidos
sin que a tu sombra rece una plegaria.
Y hermanados al final del camino
nuestros ayes se oirán adoloridos
crepitando en la pira funeraria.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho
"Quién no ha visto sin temblar
ResponderEliminarun hayedo en un pinar".
Don Antonio Machado
He ido al Hayedo de Montejo en numerosas ocasiones y no me canso de visitarlo
ResponderEliminarMe encanta
Felicidades por tu blog compi
Ana Mary
Muchas gracias Ana, a ver si un día lo organizamos y nos vamos todos.
ResponderEliminarUn saludo.
Eso estaría genial 😍🤗🤗🤗🤗
Eliminar
EliminarSería fantástico .
Es una preciosidad, en cualquier época del año
ResponderEliminarMaría Consuelo Lajara
Cierto, cada estación tiene su estado natural y sus colores.
ResponderEliminarNo importa cuando lo visites, es un lugar maravilloso!!!
ResponderEliminarJuani Martínez
Preciosas fotos
ResponderEliminarPilar Diaz Recamal
Preciosas fotos Pedro !!!
ResponderEliminarRuben Pastor
Muchas gracias
ResponderEliminarEste año lo intentamos, pero coger para un grupo es muy difícil, y sobretodo en fin de semana.
ResponderEliminarJavier Perals Samper
Ya, es mucho más fácil en días de diario, también fuera de otoño.
ResponderEliminarGracias Pedro, lo sé, con los chavales fui varias veces pero lo hemos intentado con la Asociación en Junio y no ha sido posible. Un abrazo.
ResponderEliminarJavier Perals Samper
En grupo siempre es muy difícil, lo mejor es ir a primera hora y siempre coges sitio, incluso en otoño, pero no pasando de tres o cuatro personas.
ResponderEliminarUnas fotos preciosas bonito reportaje
ResponderEliminarPilar Diaz Recamal
Muy bonitas fotos Pedro
ResponderEliminarChelo Villarin Recio
Precioso y preciosas fotos
ResponderEliminarAna Diaz
Es un sitio único
ResponderEliminarMaría Consuelo Lajara
Muchas gracias, y si, es un un lugar único.
ResponderEliminarPreciosas fotos
ResponderEliminarCoral Yela Hernandez
Muchas gracias Coral.
ResponderEliminarMuy bonitas! Una pena que cueste tanto conseguir pase!!
ResponderEliminarCristina Lozano Pineda
Bueno, si vas un día de diario y estás a primera hora, es bastante fácil conseguir entrar.
ResponderEliminarSi pinchas en la dirección puedes ver y leer todo, verás que no es tan difícil entrar en otoño, el resto del año es mucho más fácil.
ResponderEliminarMuchas gracias
ResponderEliminaral otro lado de arroyo existe un camino paralelo y se ve exactamente igual que lo que te dejan ver pero ademas con otra perpestiva diferente,no siempre lo mejor es lo estipulado y en esta ocasion merece la pena comprobarlo
ResponderEliminarPedro Sanchez-valladares
Una maravilla. Gracias
ResponderEliminarGloria Diaz
que ganas de poder ir!! que maravilla!!
ResponderEliminarPino En Las Nubes
donde hay que contactar para ir y pedir reserva?
ResponderEliminarPino En Las Nubes
Si pinchas en la dirección puedes ver donde puedes hacer la reserva allí mismo y el teléfono.
ResponderEliminarUna maravilla seria conocerlo
ResponderEliminarAngeles Diaz
Bellísimo
ResponderEliminarAngela Aguilar Parra
Enhorabuena preciosas fotos y lugar
ResponderEliminarAurora Ferrera Ruiz
Hayedo de Montanejo es un lugar muy rústico y con gran vegetación, lo hemos visitado en familia y, nos encantó recorrer ese lugar. 🌳🌱🌲🌿🌾🍁🍂🍃
ResponderEliminarMaria Eugenia Blázquez Bascuas