Todo lo que emana en el Camino de Santiago: personas,
naturaleza, paisaje, arte, historia, fe, amistad, cae sobre los peregrinos y hace
que éstos se transformen en una especie de enorme sensibilidad que se puede sentir
y hasta tocar con las manos. El Camino es mitad sagrado, mitad terrenal, y a cada paso aún hoy sigue estallando en los
corazones de los peregrinos igual que hace siglos.
Peregrinar a Santiago es una gran aventura, para unos espiritual y para casi todos física, por lo que estar preparado es sin duda
una forma de éxito. Toledo, Villamiel, Novés,
Escalona y Cadalso han sido ya parte de nuestro Camino, más tarde será Cebreros,
San Bartolomé de Pinares y Ávila, luego Dios dirá, porque el misterio del
Camino fluye cada día a medida que se van descubriendo lugares y paisajes, pero
mucho más cuando brota la amistad y confraternización con otros peregrinos.
Este es el verdadero misterio y milagro que el Apóstol y el Camino hace entre los peregrinos.
A todos los peregrinos que desde Toledo a Cadalso han
compartido experiencias, sensaciones, amabilidad, cansancio y comida.
Ultreia y Buen Camino
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
ResponderEliminarMuy emotivo y cargado de amor por el camino.
Inés