lunes, 31 de marzo de 2014

Recordando a nuestro Jesús de Medinaceli. La grandeza del hombre está en ser dueño de sí mismo y vivir en libertad.



        La grandeza del hombre está en ser dueño de sí mismo y vivir en libertad.
       Si solamente haces lo que te gusta o porque lo hacen los demás, no eres libre.
       Si claudicas ante la lucha y tienes miedo al esfuerzo, no eres libre.
       Si crees en Jesús y le sigues fielmente, entonces sí eres libre. 




Para creer de verdad, para ver a Cristo y optar por Él es preciso vaciarnos de nuestro orgullo, de nuestra autosuficiencia. 

El cristianismo parte de la fe o adhesión total a Jesús, pasa al corazón, pues exige amor a Cristo y a los hermanos, y se radica en la voluntad para pedir un esfuerzo constante a fin de vivir en cristiano y pasar por el mundo en función de testigos de fe. "Ser testigo es vivir de tal forma que nuestra vida no tenga sentido sin Dios". 




El hombre es un ser abierto al futuro. Un hombre sin esperanza es tan absurdo como un hombre sin inteligencia, porque la vida humana es sed, ansia, afán, deseo de un mañana... 
La grandeza del hombre está en ser dueño de sí mismo y vivir en libertad. 
Si claudicas ante la lucha y tienes miedo al esfuerzo, no eres libre.




Ser luz y ser maestro dice una referencia a nosotros: debemos dejarnos iluminar y debemos dejarnos enseñar para seguirle... Es muy triste la frase de que "la luz brilló en medio de los hombres y los hombres no la recibieron". 
Ser libres es ser capaces de dominarnos en lugar de decir sí a todo lo que nos apetece. 

Abusar de la libertad es perderla. "El que comete pecado es esclavo del pecado", y hay una larga lista de esclavitudes: del miedo, del dinero, del respeto humano, de la carne, de la moda, del tabaco, del alcohol, de la droga... 




Nuestros mayores repetían constantemente el nombre de Dios: en el saludo, en la despedida, en la mañana, en el atardecer.
¿Y nosotros? Si lleváramos a Dios en nuestras mentes y en nuestro corazón, luego lo llevaríamos a la vida, seríamos testigos suyos en una sociedad que quiere olvidarlo. 




Amar es una postura de donación, de entrega, de servicio. Amar no es dar, es darse. Es exigir que el punto de mira no sea siempre el yo, sino que también piense en el Tú, en él, en ellos. Que los otros tengan un puesto en tu corazón, en tu mente y hasta en la cartera de tu bolsillo.
Jesús nos dejó el amor como señal de los suyos: "En esto conocerán que sois mis discípulos: en que os amáis los unos a los otros...", y nos dejó el mandamiento de su amor en la despedida como "un mandamiento nuevo". 


Zorro Corredero
Fotos: Antonio

viernes, 28 de marzo de 2014

La Piedra Escrita de Cenicientos




LA PIEDRA ESCRITA
                                                          



                                                                          
Vestigios son del tiempo y la memoria
del paso de unos hombres por la tierra,
mostrando el ataúd cuando se cierra
diciendo que la vida es provisoria.



Es figura pétrea en nuestra historia
que no se aturde, aflige ni se aterra,
y el misterio de roca inerte encierra
a una esfinge y en nada transitoria.

Modelo  de la mano y de la maza 
de los viriles ancestros coruchos
y el cincel que a esta piedra destaja

                                                       es mole semejante a esta raza                                                        
de viñedos,  águilas y aguiluchos
donde el corucho se afana y trabaja.

Saturnino Caraballo


jueves, 27 de marzo de 2014

Peñaranda de Duero ( Burgos )



                                  Peñaranda de Duero ( Burgos )




Peñaranda de Duero es un pueblo de la provincia de Burgos, se encuentra a unos siete kilómetros de Aranda de Duero. Está situado en una pequeña depresión del terreno en la vega que forma el río Arandilla, afluente del Duero.





Entrado en la villa por una de las puertas de la antigua muralla, llagamos hasta su Plaza Mayor, edificios con soportales, una fuente antiquísima, la colegiata de Santa Ana, el Rollo y el palacio de los Miranda hacen que sea con toda seguridad una de las más bellas y características plazas castellanas que mejor se conserva. La vista es admirable; de trazado irregular y totalmente restaurada encontramos a la izquierda el Palacio renacentista de Avellaneda, también llamado de los Miranda por haber sido encargado por Don francisco de Zúñiga y Avellaneda, tercer Conde de Miranda a comienzos del siglo XVI y considerado hoy como una de las mejores obras renacentistas de la zona.





El Palacio de los Miranda, declarado Monumento Nacional es uno de los más bellos ejemplares del plateresco español. A primeros de los años 50 se encontraba en ruinas y fue comprado por el Estado que lo cedió a la Sección Femenina, que procedió a su restauración para una vez terminadas las obras instalar en él una escuela de mandos de dicha Sección Femenina. A pesar de la cuidadosa restauración que se realizó, fue necesario realizar una moderna construcción adosada al palacio que perjudicó su arquitectura.





El palacio fue edificado a mediados del siglo XVI por Don Francisco de Zúñiga y Avellaneda, tercer Conde de Miranda, que hizo traer a destacados artistas para colaborar en la construcción del mismo.
La fachada ostenta bellos ventanales ornamentados, destaca la portada plateresca con el escudo de los Miranda.




Al traspasar la puerta entramos en un noble espacio cubierto, desde donde entramos al patio por un arco decorado de finos alicatados. El patio central, de gran elegancia, consta de dos pisos de arquerías. El primero de pilastras y el segundo de columnas con relieves entre los arcos y balaustrada de piedra. En el centro del patio encontramos un pozo con gran brocal.





Una magnifica escalera con un soberbio artesonado, conduce a la galería alta. Desde esta galería se accede a las principales habitaciones del palacio, cuyos ventanales se asoman a la Plaza Mayor. Todas las habitaciones están decoradas con artesonados de madera tallada, todos distintos en cada una de las salas, y combinados con yeserías de estilo mudéjar y plateresco. Las ventanas también conservan los antiguos cierres de madera.





Destaca entre sus estancias por sus proporciones y valor artístico, el llamado salón de los embajadores, donde destaca la chimenea de excelente trabajo de yesería y trabajado cincelado en la tribuna.




En tiempos pasados el famoso Rollo, declarado Monumento Nacional se encontraba fuera del recinto de la población, muy cerca de la muralla. Hoy el Rollo se encuentra en la Plaza Mayor junto a la iglesia, lugar al que fue trasladado en el año 1959.





Este monumento fue levantado como símbolo de la jurisdicción del señorío de Miranda, es de fina traza ojival y está magníficamente labrado.




La Colegiata, se eleva frente al Palacio de los Zúñiga, fundada en 1605 por D. Francisco de Zúñiga y Avellaneda, séptimo conde de Miranda  y primer duque de Peñaranda, está dedicada a Santa Ana por bula de Pablo V.





La iglesia es amplia y su esbelta torre sorprende por su vigorosa arquitectura. El grandioso templo destaca por un  crucero de gran elevación, que se apoya en cuatro arcos.




El retablo mayor fue proyectado por Ventura Rodríguez, tiene un relieve con la imagen de Santa Ana circundada por cuatro columnas en cuyas bases figuran los escudos de los fundadores. Una escultura de Jesucristo Corona el retablo, siendo la obra artística más interesante del templo.





En el presbiterio de la nave mayor, hay una lápida en mármol negro con una inscripción donde se dice que detrás está el corazón de Don Cipriano Portocarrero y Palafox, Conde de Montijo y de Miranda, duque de Peñaranda, fallecido en 15 de marzo de 1859. Este señor fue el padre de la Emperatriz Eugenia de Montijo.






El templo conserva una colección de reliquias, ornamentos sacerdotales, cálices y dos esculturas del siglo XIII. Algunas de estas reliquias proceden de las iglesias de San Miguel y San Martín, absorbidas por la Colegiata.






La sillería del coro es de nogal con preciosos labrados. La fachada de la iglesia tiene tres bustos romanos procedentes de Clunia, también proceden del mismo lugar las columnas con capiteles corintios de la escalinata de la entrada. En otro tiempo estos capiteles sostenían unas rejas.




Al entrar en la Plaza Mayor llama la atención el castillo que se eleva al fondo sobre un roquedo. Fue levantado en tiempo de Fernán González, época en la que el Duero era la frontera entre moros y cristianos, formando parte de la línea fortificada que comprendía Gormaz, San Esteban, Alcozar, Langa, Coruña del Conde y algunos más. Su finalidad era militar y según algunos historiadores, es muy posible que al abrigo de esta fortaleza, en otro tiempo llamada Peña de Aranda, se formara la población de Peñaranda.




Del castillo se conservan lienzos de muralla y torreones almenados, puertas levadizas  y la cuadrada torre del homenaje, coronada de almenas y ventanales en ojiva. Desde el castillo descendía la muralla con tres puertas que protegía al pueblo.




Existen algunas leyendas sobre esta fortaleza medieval. Una de ellas narra la historia de la Cantamora un hada encantada de la que aún se oye el eco de su voz entre los muros del castillo, la otra es referente al Diablo, que dejo marcada su huella el la peña rojiza donde se asiente al castillo en una aparición nocturna.           




Otros edificios interesantes de Peñaranda son el convento de Religiosas Concepcionistas fundado por el mismísimo conde de Miranda y en cuya iglesia se conserva un artesonado de madera que cubre toda la nave del templo. Su primera abadesa fue Dª Ana de Zuñiga, hija del fundador.

El Hospital de la Piedad con un bello patio de grandes proporciones y una botica del siglo XVIII, una de las más antiguas de España o tal vez la más antigua son otros de los edificios que no hay que dejar de ver en Peñaranda.




Peñaranda de Duero siempre fue y sigue siendo un pueblo muy querido por mi familia, aquí nació mi bisabuela Balbina Bolarte Pariente y su hermana Lucia las cuales partieron para Madrid y posteriormente  a Cadalso en el año 1883. Balbina se casó en Cadalso y aquí residió has su muerte.




Dedicado a mi bisabuela Balbina Bolarte Pariente y a su hermana Lucia naturales de Peñaranda, al matrimonio compuesto por Julián nacido en Hontoria del Pinar y su esposa Constan natural de Peñaranda de Duero y a sus hijas Isabel y Marisol , familiares todos ellos muy queridos y recordados.


Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso

martes, 25 de marzo de 2014

De Cadalso a Piedra Escrita de Cenicientos

 



Cadalso, sábado 22 de marzo, la lluvia arrecia a primeras horas de la mañana, hoy la AACSCV tiene previsto realizar una marcha-visita desde Cadalso hasta la histórica y enigmática Piedra Escrita, situada en el término de Cenicientos.




Unos partieron desde Cadalso a los ocho de la mañana y los más vagos, entre los que hoy me encuentro, hemos salido de la gasolinera a las diez, dos horas más tarde, y no porque vayamos más deprisa, sino porque vamos en coche, casi na.

Tanto los caminantes como los mecanizados, habíamos quedado en el cruce de la carretera que une Cenicientos y Almorox, y al que desde Cadalso se llega por el Pilar y Puente Jabonera.




Desde este cruce tomamos dirección Cenicientos, y a pocos metros un camino ancho que sale a la izquierda nos llevará en no más de media hora hasta el lugar conocido desde hace siglos como Piedra Escrita.

La Primavera acaba de comenzar, la lluvia de esta mañana ha dado paso a un intermitente sol que aparece entre las nubes y colorea un paisaje de enorme belleza, la naturaleza siempre resulta bella, sólo es cuestión de sentirla, y esta vez tengo la sensación de que todos los participantes estamos en esta línea.




El musgo nos ofrece su mejor color, los prados verdean con el sol y la lluvia recogida, los caminantes respiran el aire puro y se empapan del ambiente que hoy nos está proporcionando este lugar.

Pronto llegaremos a la Piedra Escrita, para unos será la primera vez y para otros una más, pero tanto para los primeros como los que ya conocen la Piedra, es un momento mágico que a pesar de la veces que se haya visitado, siempre te llena, te fascina y ta hace pensar en su pasado, en su historia y en las gentes que vivieron y sintieron este espacio tan lleno de vida, a pesar de los siglos pasados.  




El grupo avanza camino de lo enigmático, de los desconocido y de la historia, una historia llena de cultura que ha permanecido aquí desde época romana y que a través de los siglos ha servido para muchas cosas, pero hay una que me sigue impactando, es la de unir a personas. Hoy como hace tantos siglos, este lugar, esta piedra, ha vuelto a servir para unir a un grupo de personas 



    Piedra punky.  



Son personas de distinta ideología, de distintos pensamientos religiosos, de distintos pueblos y hasta épocas pero unidos en un mismo fin, pasarlo bien , disfrutar de la naturaleza y sentir la historia de Piedra Escrita.

Al llegar a una extraña piedra con dos agujeros y que parece indicar que aquí comienza la entrada al espacio que delimitaba la Piedra Escrita y su entorno, nos paramos y Javier, excelente historiador y comunicador nos describe el lugar, nos introduce sabiamente en la historia, nos atrapa con la leyenda y nos prepara para el momento de ver la Piedra Escrita romana de Cenicientos.





Y por fin tras unos pasos llegamos a nuestro destino final, un espacio abierto, natural y testimonial de lo que aquí sucedió hace muchos siglos. Hoy los caballos siguen paciendo como entonces, la mirada del sol sigue siendo la misma y el símbolo de la Piedra Escrita parece hacernos sentir lo mismo que en aquella lejana época romana sintieron los que aquí se reunían para dar gracias y para hermanarse.




Junto a la Piedra, el sol calienta, las nubes juegan en el cielo y nos regala esta bella estampa, es la magia del lugar, es la esencia de la vida y de saber disfrutarla, es tantas cosas que podemos encontrara en lo diario, en lo sencillo, en lo nuestro, que nos saca de la rutina y nos enfrenta a la vida y al disfrute de los que tenemos al lado.





Ahora es el momento de la historia, http://zorrocorredero.blogspot.com.es/2013/08/piedra-escrita-de-cenicientos.html de conocer su origen, de saber por qué y desde cuanto está ahí, y para eso nada mejor que Javier, ese enorme comunicador y desde luego para mi mucho mejor persona, que nos va relatando cada grabado, cada letra de esta enorme Piedra. 





Y al final como queriendo ser una parte más de la Piedra Escrita y de su pasado histórico, la imagen aparece arriba, es un momento fascinante y seductor en el que también el sol quiere participar con sus rayos en este momento sencillo y vulgar para muchos pero lleno de fantasías para los que hasta aquí hemos llegado.





El entorno de la Piedra está llenos de historias y leyendas del pasado, como este "cristo" para sacar agua del pozo y regar, pero también está plagado de momentos de hoy reflejados en esos huertos http://zorrocorredero.blogspot.com.es/2013/10/el-huerto-de-piedra-escrita-en.html que ya se van preparando para la llegada de la siembra y que en verano darán sus frutos para deleite y pasión de unos hortelanos coruchos que desde hace siglos siguen cuidando de sus familiares huertos.




Y también el paisaje nos proporciona imágenes espectaculares, regalándonos auténticos cuadros en cualquier lugar de nuestro recorrido. Un charca, la peña de cenicientos que se deja abrazar por las nieblas primaverales y las nubes que confieren al cielo un aspecto de extraordinario color y fantasía. Que grande es todo cuando se quiere y aprecia.





La Peña ce Cenicientos, la Sierra cadalseña Lancharrasa y la Peña Muñana de Cadalso nos miran desde la lejanía, nos reconfortan en este momento de disfrute y nos animan a seguir viviendo y sintiendo este espacio de tanta belleza.




Un abrazo a todos los participantes, a los de Cadalso y a los de Escalona y muchas gracias a Javier, Richard, Canillo y José María, integrantes de la AACSCV por su buen hacer y por darnos la oportunidad de sentir la amistad y la cercanía que tanto puede ayudar en el día a día a las personas.











Zorro Corredero
Fotos: Archivo fotográfico Pedro Alfonso