Torre y portada de la iglesia
En la etapa del Camino de Santiago entre Estella y Los Arcos merece la pena
dar un pequeño rodeo para visitar el Monasterio de Irache. El peregrino se verá
recompensado con la visita al monasterio y con la gratificante fuente de las
Bodegas Irache, que situada junto al monasterio dispone de sendos grifos, uno de
agua y otro de vino, los cuales servirán para saciar nuestra sed en cualquiera
de las dos formas.
El monasterio benedictino de Irache está documentado por primera vez en el
año 958. En el siglo XI Irache fue creciendo gracias a su emplazamiento cercano
a Estella en la ruta del camino de Santiago.
Es a mediados del siglo XI, cuando García de Nájera funda en Irache un
Hospital de peregrinos, pero cuando mayor esplendor alcanza el monasterio es a
finales de este siglo gracias al abad San Veremundo.
A mediados del siglo XII se construye el templo abacial de cabecera románica
y naves cistercienses, pero a partir del siglo XIII comienza la decadencia del
monasterio que se acentúa durante los siglos XIV y XV, descendiendo los monjes
y empezando a arruinarse el monasterio.
De nuevo en 1522 vuelve a florecer gracias a la llegada de los monjes
venidos de San Benito de Valladolid. En 1809 durante la ocupación francesa los
monjes abandonan el monasterio, de nuevo es restaurada por Fernando VII en
1820, siendo suprimida definitivamente en 1839.
Coronamiento barroco del siglo XVIII con la imagen de la Inmaculada.
El Monasterio de Irache está formado por edificaciones medievales,
renacentistas y barrocas, con dos claustros en su interior y una iglesia de
finales del siglo XII
La torre de la iglesia se construyó en 1609 en estilo herreriano y está
inspirada en las torres de la basílica de El Escorial.
La portada de la iglesia se encuentra adosada a la torre y sirve de acceso a
la puerta principal que pertenece al siglo XII, con cinco arquivoltas lisas
sobre columnas y capiteles con motivos vegetales.
Arquivoltas sobre columnas.
Motivos vegetales de los capiteles
Firmas de canteros en las piedras que forman el pórtico de entrada.
La iglesia es un grandioso templo medieval que comenzó a construirse a
mediados del siglo XII y se terminó en el siglo XIII. El triple ábside y el
crucero pertenecen a las primeras fechas y son de estilo románico, las naves
posteriores están realizadas en arquitectura cisterciense.
La planta se compone de tres naves, con tres tramos cada una, la central los
tiene cuadrados y las laterales medio cuadrados, un crucero y la cabecera
románica formada por un triple ábside.
El crucero alcanza la altura de la nave central. Un arco apuntado doble
sobre columnas únicas, da acceso al ábside mayor.
Ábside central.
Claustro plateresco. Ala norte con cinco arcadas.
El claustro, de planta rectangular, presenta cinco
arcadas en las alas norte y sur y seis en los otros dos lados. Las arcadas se
apoyan en pilares octogonales. Cada uno de estos pilares lleva capiteles
corridos que recogen los nervios de las bóvedas góticas que cubren las crujías. En el centro una fuente adorna el claustro.
Se comenzó a construir en 1540 por el cantero
guipuzcoano Martín de Oyarzabal, a su muerte cinco años más tarde continua la
obra su colaborador Juan de Aguirre. Después de unos años de interrupción las
obras se reanudan en 1574
Madallones con cabezas en las enjutas de los arcos exteriores del claustro
Un conjunto rico en decoración renacentista formado por
motivos grutescos, formados por elementos fantásticos de animales, vegetales y
humanos entrelazados, ocupan los capiteles, ménsulas y bóvedas.
El sobre claustro manierista, estilo surgido en Italia hacia
1520, consta de un orden dórico con arcos de medio punto. Fue terminado en 1589 por Juan Sarobe.
Pilares con capiteles que recogen los nervios de las bóvedas góticas.
Zorro Corredero
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
No conocía este monasterio, me ha gustado mucho tu reportaje.
ResponderEliminarUn buen reportaje y buenas fotos.
ResponderEliminarPeregrino-2012