Realizados en barro eran los mejores recipientes para cocinar las legumbres y patatas a fuego lento en las chimeneas, nuestras abuelas los ha utilizado siempre, hasta que aparecieron los de porcelana, menos pesados y más fáciles de limpiar.
No está mal de vez en cuando hacer un cocido en la lumbre con uno de estos pucheros, el resultado puede ser y será espectacular ya que al ser estrecho en su base se adapta perfectamente a la lumbre y al estar los garbanzos más juntos les da un sabor especial, y no digamos el olor cuando se destapa.
Lo dicho, no dejes pasar este invierno sin hacer un cocido o guisado en lumbre con un puchero de barro, te traerá buenos recuerdos y te lo agradecerá ese órgano del aparato digestivo llamado estómago.
Ah!...y la cuchara de palo, como debe ser.
Cobra
Aunque se suele conocer por pote, aquí en Cadalso siempre ha recibido el
nombre de cobra, está realizada en hierro fundido y tiene un gran asa que sirve
para colgarla, se utilizaba para calentar agua y siempre estaban en las chimeneas
con el agua hirviendo para ser usado en cualquier momento, este agua se usaba
para cocinar, para afeitarse y para todos los usos de la casa.
Yo las he conocido siempre colgadas de unas llares (Cadena) hasta el fuego
en las chimeneas de Cadalso, todas las casas tenían una cobra que con el tiempo
han pasado a formar parte de los adornos al abandonarse su uso.
Museo Etnológico de Cadalso-Casa Corredera
Fotos: Archivo Fotográfico Pedro Alfonso
Cobra. Acabo de aprenderlo. Tengo una de esas en Sotosalbos, al lado de la chimenea, la próxima vez que vaya te haré una foto ya que la he recuperado y tratado el óxido y parece nueva. Con su tapa y todo.
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